El icónico artista de Brixton (Londres) y residente en Nueva York murió dos días después de haber cumplido 69 años y de lanzar su vigésimo quinto álbum de estudio, Blackstar, un proyecto plagado de simbolismos y lo que parecen ahora referencias a su propia muerte.
El documental, que emitirá este sábado el canal público a las 21:00 GMT (17:00 hora paraguaya), prácticamente coincidiendo con el primer aniversario del fallecimiento de Bowie y con el que sería su 70º cumpleaños, desvela que el cantante supo que no se curaría de su enfermedad mientras grababa el vídeo musical Lazarus.
“Supe al final de la semana de grabación que él se había enterado de que todo había terminado”, indicó el director de ese vídeo musical, Johan Renck, en declaraciones hechas para el documental David Bowie: The Last Five Years, que indaga en los últimos años del músico.
En esa entrevista, Renck aclaró además que la temática de ese vídeo clip, en el que se ve a un Bowie pálido, con los ojos cubiertos con vendajes, tumbado en una cama de hospital, no versa sobre la enfermedad del músico, como se ha especulado. “Para mí, tiene que ver con el aspecto bíblico, con el hombre que volvería a renacer, y no tiene nada que ver con su enfermedad”, apuntó.
La cinta, dirigida por Francis Whately -que ya estuvo al frente de David Bowie: Five Years en 2013-, incluirá sonido inédito de la grabación de Lazarus y desvelará aspectos desconocidos del compositor, con entrevistas de allegados, centrándose en sus dos últimos trabajos, The Next Day y el citado Blackstar.
Con más de 136 millones de discos vendidos en todo el mundo, entre su extenso y admirado legado, Bowie, afincado en Nueva York durante años, alcanzó el estrellato en 1972 con The Rise and Fall of Ziggy Stardust and The Spiders From Mars, y ha dejado para la posteridad trabajos de culto como Heroes (1977), Lodger (1979) o Scary Monsters (1980).