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La pianista invitada nació en Río de Janeiro, Brasil y actualmente reside en Bélgica. Sylvia ha actuado desde los seis años como solista y recitalista en Europa, América y Asia. Ha llevado su arte a importantes salas de todo el mundo y en comunidades necesitadas en diferentes países.
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El programa preparado para esta noche concierto incluye en una primera parte la interpretación de “Los pájaros”. Suite para pequeña orquesta, de Ottorino Respighi (1879-1936).
La segunda parte será con el Concierto para piano y orquesta Nº 4, en sol mayor, Op. 58 de Ludwig van Beethoven. Este es “el concierto para instrumento solista más perfecto jamás compuesto”, según Emil Ludwig, el más importante biógrafo de Beethoven. En esta ocasión, esta obra estará a cargo de la brasileña Sylvia Thereza.
Además, como cierre de una semana cargada de actividades, la pianista impartirá la clase magistral “El cuerpo y el virtuosismo”, mañana en el Teatro Tom Jobim (Eligio Ayala c/ Perú), a las 15:00, dirigida a profesionales y estudiantes de la música en general. La inscripción se realiza a través del enlace https://t.ly/H0An.
Al vuelo del piano
Sylvia Thereza ya viene de una presentación ofrecida el pasado martes en el Teatro Tom Jobim del Instituto Guimarães Rosa Asunción (Antiguo Centro Cultural de la Embajada de Brasil) hasta donde llegó mucha gente para verla actuar.
En la ocasión, la artista ofreció un programa denominado “Sylvia Thereza toca Chopin & Villa-Lobos” mostrando una amplia capacidad de abordar el repertorio del polaco Frédéric Chopin y el brasileño Heitor Villa-Lobos.
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En una primera parte actuó acompañada del violinista Rodrigo M. Braga. Allí hicieron “O Canto do Cisne Negro”, el preludio y el aria de las Bachianas Brasileiras Nº 4, y el movimiento O Trenzinho do Caipira, de las Bachianas Brasileiras Nº 2, de Villa-Lobos.
La segunda parte alternó entre un compositor y otro, yendo de los Nocturnos 1 y 2, Op. 21, y la balada Nº 1, Op. 23, de Chopin, a las Impressões Seresteiras y la Dança do Índio Branco, de Villa-Lobos.
La pianista demostró su ejecución de gran talla y, al mismo tiempo, encantó a la platea por su sencillez en este regreso, ya que el año pasado llegó por primera vez al país. Esta noche la gente que no la vio aún puede ir a deleitarse con su toque brillante, y quienes ya la vieron, volver a emocionarse.