Este plan de seguros estará disponible a partir del mes próximo y cuenta con un presupuesto de 750 millones de libras (870 millones de euros) para cubrir los costes de las cancelaciones.
Inglaterra levantó el pasado 19 de julio las últimas restricciones por el coronavirus, por lo que ya no hay límites sobre el número de asistentes que pueden acudir a este tipo de eventos, muchos de ellos organizados al aire libre en verano.
Este sector había pedido ayudas al Gobierno después de que varios fueran cancelados esta temporada.
El diputado conservador Julian Knight, que preside el Comité de Cultura de la Cámara de los Comunes, dijo a los medios que, si bien este plan “llega muy tarde para algunos (espectáculos) este verano, facilita la confianza que el sector necesita a la hora de planificar e invertir en futuros eventos”.
No obstante, la Asociación de Festivales Independientes informó de que quiere trabajar con el Gobierno para asegurar que este plan también preste apoyo en caso de que los eventos se vean obligados a reducir el aforo si hay una reintroducción de la distancia social o si los artistas se ven obligados a hacer cuarentena tras contagiarse de coronavirus.