“He trabajado mucho. Parecía que no me lo tomaba en serio... Pero yo quería triunfar. Ahora descanso. No regresaré al cine o al teatro. Estoy disfrutando de la vida”, sentenció con humor el astro francés en una entrevista concedida a la emisora “RTL”.
De 81 años, “Bébel”, como le apodan los franceses, aseguró que no considera su pasado teatral más importante que sus películas, aunque recordó que fue sobre las tablas donde comenzó su carrera, diez años antes de obtener sus primeros papeles gracias al cine de la llamada Nouvelle Vague, a finales de los años cincuenta.
El actor, que sufrió un accidente cardiovascular en 2001, realizó estas declaraciones durante la inauguración de una academia teatral que dirige su sobrino Olivier Belmondo y que él apadrina.
Descubierto por Jean-Luc Godard, que le dirigió en el corto Charlotte et son Jules (1960) y que le consagró como actor con “Al final de la escapada (Á bout de souffle, 1960), Belmondo es una de las personalidades preferidas de los franceses.