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Según el reporte Art Basel UBS el mercado del arte se contrajo a valores de 2009, un punto de no retorno sin precedentes que hace imposible su recuperación en el mediano plazo, dejando a millones de artistas en todo el mundo con ingresos por debajo de línea de pobreza.
“Un día me pregunté seriamente: ¿por qué los artistas siempre fueron pobres?” así describe Martín Sastre, artista uruguayo referente de su generación en América Latina, cómo surgió esta primera moneda digital para artistas.
“Así como al resto de los trabajadores se les paga por su tiempo, a nosotros sólo se nos paga por un producto terminado y todo lo invertido, tiempo, dinero y trabajo, corre por nuestra cuenta”.
LALA es una moneda digital creada por Sastre y un equipo de emprendedores que vienen desarrollando su propia plataforma transaccional https://www.lala.art/
Artistas de todo el mundo podrán capitalizar mediante LALA su tiempo de trabajo generando un ingreso fijo mensual gracias a suscriptores llamados “Ángeles” que accederán de forma exclusiva al proceso creativo de los artistas que elijan y luego a la subasta de sus obras terminadas.
LALA propone una economía horizontal, sin comisiones ni especulación, dando valor real al trabajo real, generando un ecosistema fuerte y sustentable del que todas y todos saldremos enriquecidos” agrega Sastre, cuyas obras forman parte de colecciones como la del Museo Guggenheim de Nueva York y cuyo segundo largometraje como director “Nasha Natasha”, fue de los contenidos más vistos en Netflix durante 2020.
Los artistas que quieran sumarse a la iniciativa pueden hacerlo desde ahora subiendo fotos de sus obras con el hashtag #GlobalArtReset y el 15 de abril un post vacío con un color de su elección para resetear el mercado tradicional y comenzar a transitar por un mercado del arte sustentable, donde el tiempo de trabajo de los artistas tendrá valor propio en LALAS