Cineasta italiana analiza el proceso de cambio en Paraguay

BUENOS AIRES. Los ecos de la dictadura de Alfredo Stroessner en Paraguay, que chocan con la voluntad de cambio de ese pueblo son analizados en el documental “La tierra sin mal”, de Anna Recalde Miranda.

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El filme se exhibe en el marco de la Segunda Semana de Cine Documental Italiano, que hasta el 8 de diciembre tiene lugar en Buenos Aires, en el cine Gaumont.

"Paraguay es un país con una historia muy trágica, muy fuerte, de la que poco se sabe en Europa. Eso profundizó mi interés por esa tierra, donde tengo mis raíces porque allí nació mi padre " , dijo la cineasta italiana. La Tierra Sin Mal es un lugar mítico que los indígenas guaraníes, habitantes originarios de Paraguay, buscaron incansablemente. Es un sitio donde hombres y mujeres viven en libertad, con plena justicia y donde no existen relaciones de poder.

Esta historia fascinó desde pequeña a Recalde Miranda -que hoy tiene 30 años- y despertó su curiosidad por Paraguay,  " un país -dice- que por una especie de maldición, tuvo un destino opuesto "  al de aquel lugar ideal. Uno de los que buscaban esa Tierra Sin Mal fue el bisabuelo de la cineasta, Rufino Recalde Milessi, el primer diputado socialista que tuvo Paraguay entre 1914 y 1928.

La  " semilla "  persiste en la joven directora que en abril de 2008 decidió viajar al país sudamericano para filmar los últimos tramos de la campaña electoral para las elecciones presidenciales de ese año, que venció Lugo como candidato de la Alianza Patriótica por el Cambio. " Que Lugo se convirtiera en presidente representaba para mí una señal de que el pueblo paraguayo tenía deseos de cambio " , aseveró Recalde Miranda.

El documental sigue el último tramo de la campaña electoral de 2008 y da cuenta del clima político en el país sudamericano, además del  " estado de alarma "  de los representantes del Partido Colorado, que se resistía a estar lejos del poder, después de 60 años de liderazgo.    Gran parte de ese cuadro de situación se obtiene a través de los testimonios de Guillermina Kanonnikoff, Secretaria General del Movimiento Popular Tekojoja, y de Martín Almada, un activista político y defensor de los derechos humanos, reconocido internacionalmente.

Kanonnikoff, quien sufrió la cárcel y perdió a su primer esposo durante la dictadura de Stroessner  (1954-1989) , acompañó a Lugo en el camino hacia las elecciones de abril de 2008, mientras que Almada descubrió los llamados  " Archivos del Terror "  en diciembre de 1992, tras 15 años de investigación.

Miles de documentos que daban cuenta de la tortura, muerte y desaparición de opositores al gobierno de Stroessner, en concordancia con el Plan Cóndor  (la coordinación de operaciones de represión entre las dictaduras del Cono Sur en los años ’70, Ndr) , fueron hallados por Almada en un rincón olvidado de una comisaría, tras una intensa búsqueda que había iniciado 15 años antes, durante su exilio en París.    El documental tiene por momentos un tono didáctico, ideal para el público europeo, que en su mayoría desconoce la historia latinoamericana de los años ’70. Pero posee el mérito de ser una de las pocas investigaciones precisas por parte de realizadores del Viejo Mundo sobre los vaivenes del poder -tanto en esa época como en el presente- en Paraguay y en la región.

" Con este documental me interesaba resaltar por qué era importante la candidatura de Lugo, un hombre exterior a la política, para generar un cambio, y qué significaba ese cambio que el pueblo paraguayo esperaba " , explicó la cineasta.     " La tierra sin mal "  es parte de un proyecto más amplio que Recalde Miranda realizará sobre Paraguay.    En pocos días la joven realizadora viajará a ese país para  " seguir los difíciles desafíos del nuevo gobierno " .

" Mi objetivo es documentar las dificultades en el manejo del poder; las contradicciones internas propias de algunas democracias representativas y la fuerza de las personas, a pesar de las decepciones " , adelantó.

El nuevo trabajo,  " Lugo, el cambio paraguayo " , adoptará una perspectiva  " desde dentro "  de la realidad cotidiana del país subtropical, para indagar en las raíces de aquella Tierra Sin Mal, que aún persiste en la memoria colectiva. " El deseo de continuar filmando la realidad paraguaya es también, para mí, un deber moral -concluyó la directora-, porque la extensa dictadura dejó a este país huérfano de memoria visual, especialmente sobre su historia y sus movimientos sociales " .
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