¿Sirve de algo decirle, «hola», «gracias» y «por favor» a ChatGPT?

La interacción con inteligencias artificiales, como ChatGPT, ha generado un conjunto de normas de comunicación no escritas, entre las que se incluyen corteses saludos y expresiones de gratitud. Estas interacciones, ¿tienen algún impacto al comunicarse con una máquina?

¿Sirve de algo decirle, «hola», «gracias» y «por favor» 
a ChatGPT?
¿Sirve de algo decirle, «hola», «gracias» y «por favor» a ChatGPT?Archivo, ABC Color

La etiqueta cortés y la IA

Decir «hola», «gracias» y «por favor» no afecta el funcionamiento algorítmico de ChatGPT ni mejora sus respuestas desde un punto de vista técnico. La IA está entrenada para procesar texto natural y proporcionar respuestas basadas en patrones de lenguaje, no para sentir emociones o responder a cortesías.

El verdadero valor de estas cortesías reside en el efecto psicológico y social en los usuarios. El uso de saludos y expresiones de gratitud pueden humanizar la interacción, haciéndola más cómoda y familiar para los usuarios. Aunque la IA no tiene emociones, las personas pueden llegar a sentir una conexión o vinculación emocional cuando usan modales en sus interacciones.

La perspectiva de la IA

Desde el punto de vista de las inteligencias artificiales, las cortesías no alteran su capacidad de respuesta. No obstante, los términos como «hola» o «gracias» pueden ayudar a las IA a comprender mejor el contexto de la solicitud. Por ejemplo:

- Contextualización: un saludo al inicio puede indicar que el usuario está comenzando una nueva línea de consulta, lo cual puede ser útil para contextualizar las respuestas.

- Corrección: frases como «por favor» pueden influir en cómo el modelo prioriza la importancia de la solicitud, en tanto ayudan a definir el tono.

Así, mientras la IA sigue siendo insensible a los paradigmas humanos de la cortesía, incorporar estas normas en nuestras interacciones asegura que mantenemos nuestra esencia humana en un mundo cada vez más dominado por la tecnología.

El futuro

En versiones futuras, especialmente en desarrollos avanzados de IA (y en modelos de «IA social» que algunas empresas están investigando), podría llegar a importar de manera indirecta.

¿Cómo?

Si se entrenan sistemas que se ajusten dinámicamente al estilo de interacción de cada usuario (por ejemplo, más formales, más técnicos, más amigables), el tono y las palabras que uses podrían hacer que la IA ajuste su estilo de respuesta.

Ejemplo: si usas siempre un lenguaje muy cortés, el modelo podría responderte de forma más pausada, cordial y con estructuras más amables. No cambiaría el contenido técnico, pero sí el «tono» general.

Algunos futuros desarrollos apuntan a que las IA entiendan mejor la emoción detrás del lenguaje (afiliativo, agresivo, colaborativo). Si usas «por favor» o «gracias», esos modelos podrían inferir que buscas una colaboración más armónica y ajustar el nivel de detalle, paciencia o explicación en las respuestas.

Además, hay investigaciones en IA educativa, médica o de asistencia que planean «premiar» —no con mejores resultados, sino con feedback emocional positivo— a los usuarios que interactúan de manera respetuosa. Ejemplo: si dices «gracias», la IA podría responder con frases como «¡Me alegra poder ayudarte!» para reforzar el comportamiento.

Si los modelos guardan memoria de interacciones pasadas, un historial de comunicación respetuosa podría influir en cómo se personalizan las futuras conversaciones contigo, manteniendo un clima más cálido y constructivo a lo largo del tiempo.

Fuente: Generada por IA.

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