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COLONIA MANDU’ARÃ, distrito de Yasy Cañy. Dpto. de Canindeyú. (Alberto Núñez Barreto, corresponsal). Uno de los productores, Marino Duarte Quiroga, expresó que la lluvia fue prácticamente una bendición para los agricultores que se dedican al rubro familiar y de renta. “Solamente estábamos esperando la lluvia para comenzar a cultivar mandioca, porque sin las precipitaciones era imposible porque la tierra se presentaba dura”, señaló.
Indicó que varios productores no quisieron esperar y sembraron cultivos de autoconsumo y de renta bajo el riesgo de perder todo, “para la mala suerte se vino la helada que por suerte afectó sólo a los productos en etapa de crecimiento, pero no en gran número”, dijo.
“Nosotros tenemos cultivos de batata ya casi en etapa de cosecha que prácticamente no fueron afectados”, añadió Duarte.
El labriego expresó que cuenta con unas dos hectáreas de cultivos. “Tenemos sandía que se encuentra en plena etapa de crecimiento. La lluvia vino como anillo al dedo para esta producción porque permitirá tener una buena cosecha”, dijo.
El productor también destacó el cultivo de batatas, que ya logró sacar algunos frutos para el consumo familiar. “En menos de un mes estaríamos cosechando una buena cantidad para la comercialización”, añadió el agricultor.
Dijo que son optimistas con respecto a la producción de este rubro, cuyo precio de venta actual es de G. 80.000 la bolsa de 60 kilos. “Tenemos esperanza de lograr platita para cubrir las deudas contraídas para preparar nuestra chacra”, señaló Duarte.
Expresó que algunos cultivos se están recuperando tras las últimas precipitaciones. Aclaró que la siembra es ideal en esta temporada, pero la gente a veces se adelanta para tener mejor venta siendo esta práctica muy poco segura”, añadió el productor.