Cargando...
Indicó que el suelo se presenta más duro, obligando a los labriegos a hacer el esfuerzo por sacar el producto igual antes de tiempo. Expresó que prefieren cosechar de esta forma y comercializar porque de lo contrario podría registrarse una pérdida total. “Esperamos que las lluvias lleguen en los próximos días para dar alivio a la tierra luego de la fuertes heladas”, señaló.
Los productores coincidieron en mencionar que el suelo se encuentra bastante duro dificultando la extracción y venta de productos. “La mayor parte de la producción se queda atorada debajo de la tierra. Es una pérdida para nosotros”, expresó Barreto.
Agregó que algunos labriegos analizan vender lo que pueden y esperar que pase la sequía para volver a sembrar. “Al parecer la falta de lluvia va a seguir y afectará severamente a los pequeños productores. Nosotros comemos de lo que producimos”, señaló.
Barreto indicó que también están esperanzados en que el precio de la mandioca tenga algún incremento para así tener mejor ganancia.
Por su parte, el funcionario del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) en Curuguaty, agrónomo Máximo Heyn, salió al paso de las publicaciones sobre pérdidas de cultivos de renta en esta zona y afirmó que no se registró una pérdida catastrófica de la producción de mandioca, batata y maíz, sino fueron pequeños daños. Pero, dijo que si en quince días no se registra una buena lluvia todo podría empeorar.