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DENVER, EE.UU., (EFE). “Nuestro nuevo enfoque les provee a los médicos una confirmación de si el paciente tiene cáncer antes de una biopsia quirúrgica”, explicó Paul Crowe, presidente y gerente general de NuView Life Sciences, una compañía de biotecnología en Park City, Utah.
Según Crowe, el nuevo procedimiento de diagnóstico de cáncer, conocido como tomografía por emisión de positrones, se basa en análisis in vitro de elementos orgánicos para determinar la presencia de biomarcadores atraídos a células cancerosas.
Según Crowe, los estudios clínicos iniciales sobre la viabilidad de la nueva tecnología ya concluyeron “con un ciento por ciento de precisión al diagnosticar cáncer en hombres afectados”.
La segunda fase de los estudios clínicos comenzará este año en fecha todavía no determinada.
“Nuestra nueva tecnología ayuda a mejorar el diagnóstico, lo que ayuda a mejorar la salud del paciente y, por lo tanto, reducir el costo de los cuidados médicos”, indicó.
“Casi el 80% de los pacientes que pasan por una biopsia quirúrgica no tienen cáncer”, agregó.
Las biopsias negativas
En su estudio NuView Life Sciences sostiene que cada año se gastan en Estados Unidos aproximadamente 8.000 millones de dólares en biopsias negativas, para detectar cáncer de seno o de próstata.
Pero más allá del costo monetario, esos “procedimientos innecesarios” causan “una amplia gama de efectos secundarios”. Por ejemplo, uno de cada tres hombres que tuvo una biopsia negativa por cáncer de próstata luego reporta dolor moderado o alto, fiebre, hemorragias, infecciones o dificultades urinarias.
En cuanto a las mujeres, la biopsia “frecuentemente altera la apariencia de los senos y causa inflamaciones, dolor o infecciones” en el sitio de la cirugía, según el reporte.
Crowe enfatizó que las biopsias solo ahora pueden ser reemplazadas por “procedimientos no invasivos” debido a avances en estudios celulares y genéticos, que permiten que por medio del análisis de fluidos corporales, se confirme o no, la presencia de cáncer en un paciente.
“Es una tecnología nueva que se basa en aminoácidos secuenciados y péptidas que se hallan naturalmente en el cuerpo humano. Esta nueva tecnología reemplaza procedimientos imprecisos y con frecuencia innecesarios que pueden disminuir la calidad de vida de los pacientes”, declaró Crowe.
Los nuevos avances permitirán identificar rápidamente si una persona padece de cáncer y, si tiene cáncer, ayudarán a personalizar el tratamiento específicamente para ese paciente. Al reducirse el tratamiento al mínimo necesario, “se proveerá una más alta calidad de vida para todos los afectados”.