¿El perro le mordió?

La doctora María Cristina San Miguel de Vera señala que “los primeros auxilios que se deben llevar a cabo en la casa, tras la mordedura de un perro, es lavar la herida con abundante agua y jabón, y desinfección local, ya que esto disminuye la probabilidad de desarrollo y transmisión de la rabia, en caso de que el animal esté enfermo”.

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Indica que “al llegar al centro asistencial se puede realizar el lavado o desinfección de acuerdo a cómo llegue el paciente. Además, se procede a la aplicación de la vacunación antirrábica, antitetánica y se prescribe antibiótico. Estas tres medidas están sujetas al criterio profesional, según el caso. Las heridas se pueden suturar si fuere necesario”.

Manifiesta que “si la herida se pone roja alrededor o sale pus, es por infección de la herida, pues la saliva del animal tiene microorganismos que pueden ocasionar dichas complicaciones; por ello, es importante el buen lavado con agua y jabón”.

“Estamos con un control importante de la rabia en perros. No se registran casos de rabia desde hace muchos años. La circulación del virus sigue presente en lo que llamamos rabia silvestre, cuyo principal transmisor es el murciélago”, destaca la profesional.

¿Cómo actuar con el perro?

- Si el perro es desconocido, no identificado o está desaparecido, el paciente deberá concurrir a los centros donde hay vacunación antirrábica para el tratamiento completo.

- Si el perro tiene dueño, presentará su carné de sanitación o estado clínico del animal, para que el profesional médico pueda evaluar, junto con el tipo y localización de la lesión y la gravedad del paciente. El can debe estar bajo observación de 10 a 15 días.

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