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El doctor Ernesto Paredes, reumatólogo, señala que “no existe una forma general para “prevenir” la artritis reumatoide; eso sí, una vez diagnosticada, hay que evitar maniobras o movimientos que pueden facilitar o empeorar los síntomas de la artritis como el dolor, el calor, la hinchazón, el enrojecimiento y la pérdida de la función”.
La doctora Margarita Duarte, reumatóloga, explica que la artritis es la inflamación de las articulaciones. Se manifiesta siempre con la articulación hinchada, roja, caliente y es muy dolorosa.
La doctora Duarte agrega que la enfermedad puede ser muy incapacitante, por ejemplo, en la gota –un tipo de artritis– se inflama el dedo gordo del pie: la persona llora de dolor y no puede caminar por varios días.
Por su parte el doctor Paredes apunta que “los pacientes se quejan de dolor de las articulaciones pequeñas de las manos, muñecas, rodillas, tobillos y dedos de los pies, en forma simétrica. Rigidez matinal mayor a 30 minutos, hinchazón, enrojecimiento y calor, lo cual limita el uso. Casi siempre con algún familiar cercano que pueda haber tenido esta enfermedad o alguna reumática. Hay que decir que esta enfermedad NO es hereditaria, pero existiría una predisposición familiar”.
Algunos pacientes refieren que se les caen los objetos de las manos; la especialista opina que “la caída de las cosas de las manos puede ser por compresiones nerviosas o por artrosis del pulgar”.
Otro síntoma recurrente, el ruido de la quijada: “puede deberse a problemas de los meniscos que tenemos en nuestras articulaciones temporomandibulares o a artrosis de esas articulaciones”.
El protocolo a seguir
El doctor Paredes informa que ante la búsqueda de confirmar si se padece artritis reumatoide “se examina al paciente, se comprueba que presenta esos síntomas y signos, se le piden algunos análisis laboratoriales normales y específicos (PCR, artritest, anti CCP), así como algunos estudios de imágenes (radiografías, ecografía articular, etc.) y luego se diseña un esquema de tratamiento”.
El galeno describe que “el paciente logra un efectivo control de la enfermedad, siguiendo el esquema de tratamiento, haciendo el reposo correspondiente y evitando exigir a sus articulaciones más de lo que ellas pueden movilizarse estando inflamadas. Apelamos a la conciencia para respetar y seguir estrictamente las indicaciones de su reumatólogo, siempre teniendo en cuenta que la artritis reumatoide no se cura; se trata. Es imperioso seguir las indicaciones en forma para lograr una excelente calidad de vida”.
La especialista detalla que “para ver la causa de la artritis se estudian todas las enfermedades que puedan producir inflamación en una articulación: infecciones, ácido úrico, artritis reumatoide, lupus y otras”.
Arsenal de medicamentos
El doctor Paredes habla sobre el inicio del tratamiento de la artritis reumatoide.
* Iniciamos concientizando y educando al paciente sobre la enfermedad, contestando sus preguntas de la forma más sencilla.
* Indicamos medicamentos antinflamatorios, analgésicos normales y potenciados. Luego usamos las llamadas DAME sintéticas (drogas antirreumáticas modificadoras de la enfermedad) como el metotrexate, leflunomida, hidroxicloquinna), solas o en combinación.
* Luego se evalúan las nuevas medicaciones antirreumáticas, las llamadas DAME biológicas (drogas antirreumáticas modificadoras de la enfermedad); pero de tipo biológicas, que son como “vacunas” que se aplican en forma semanal, quincenal o mensual, para el mejor y total control de la enfermedad. Estas últimas son de alto costo todavía, pero están llegando las llamadas drogas biosimilares, que abaratarán costos con la misma efectividad y calidad.