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Rossana Bobadilla y el exfutbolista Carlos Humberto Paredes están casados desde hace 15 años y comparten una hermosa familia. Tienen tres hijos, Franco (14), Paula (12) y Martina (3), quienes, al igual que el papá, aman el deporte. A pesar de lo demandante que siempre ha sido su carrera, Carlos Humberto trata de participar de todo cuanto le sea posible con sus niños. “El fútbol ocupa en nuestras vidas un lugar muy importante. Nos une, nos hace discutir. Es maravilloso. Cada vez que me da el tiempo, intento acompañar a los chicos en sus actividades deportivas, sean intercolegiales o entrenamientos. Es algo que nos acerca”, revela el actual ayudante técnico del club Olimpia.
Por su parte, Rossana comenta que los dos mayores juegan al fútbol, básquet y vóley. En cuanto a la más pequeña, la mami admite que a Martina le gusta mucho más la pelota que las muñecas. “Todavía no juega, pero tiene una zurda muy potente”, advierte.
“El ver crecer a mis hijos es algo que no tiene precio. Tanto en lo físico como en lo intelectual te dan satisfacciones, con un sabor muy especial en mi vida, sin lugar a dudas”, expone el exmediocampista, quien, convencido de que sus hijos son su razón de vivir, encuentra en la paternidad una de sus principales victorias.