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Wunderschön es un término alemán que significa “hermoso” y, comúnmente, lo emplea el público austriaco al expresar su sentir tras asistir, en su país, a puestas de danza paraguaya. “Cuando presentamos nuestro espectáculo con las botellas o el cántaro, observan atónitos y eufóricos. Tras cada coreografía, ovacionan de pie. Es indescriptible cómo los extranjeros valoran nuestro folclore”, dice Estrella Godoy de Gubo, bailarina nacional residente desde hace nueve años en Viena (Austria).
La compatriota confiesa que de su querida tierra guaraní añora la calidez, cordialidad y virtud de sonreír, aun en los momentos más duros, propias de los paraguayos; además de las comidas típicas, y compartir en familia y con amigos.
En el 2007 emprendió vuelvo a Viena con su marido y sus pequeños Maxi y Erick (17 y 14 años), y recuerda: “Luego de tres meses allí, nos visitó mi madre, muy valiosa en la crianza de los chicos, quienes extrañaban mucho nuestro país. Un año después, mi hermana menor fue a vivir con nosotros y me ayudó a fundar el ballet Jeroky Paraguay, en el 2011; hoy tenemos 14 bailarines residentes en Europa, además de otros profesionales que viven en el Paraguay, dominan las presentaciones y cada año se suman a la gira europea”. Estrella cuenta que la autoría de las coreografías son suyas, y acota: “Estudié danza paraguaya ininterrumpidamente durante 13 años, desde los cinco, con los mejores profesores, como Domingo Barúa, Kathy Ortega y Alce Acuña, entre otras reconocidas figuras del ambiente”.
Otro aspecto que subraya la bailarina es que cuida mucho las selecciones musicales para cada ocasión: “Elijo las versiones más representativas. Una de ellas es Dulce tierra mía (con letra de Augusto Roa Bastos y música de Agustín Barboza; muy emocionante porque el maestro la escribió en el exilio) en una hermosa versión interpretada por Luz Mabel Ortigoza, que dice: ‘Al pensar en ti, dulce tierra mía de mi corazón, vuela un panambí’, y en la coreo utilizamos abanicos de ñandutí, que representan el panambí en manos de las bailarinas. No existe corazón paraguayo que no se emocione con esta danza”. También, incluye canciones del cedé de ABC Color en homenaje al maestro Herminio Giménez, interpretadas por Juan Cancio Barreto, y temas de colegas paraguayos del grupo Sapukai de Suiza, como una versión entonada de Galopera. “Me vuelco a temas cantados que mencionen al Paraguay, para que los espectadores no nos confundan y se les grabe la música en la mente. Viva el bravo Paraguay cierra toda presentación”, dice.
El staff que encabeza Estrella recorrió diversos sitios, dejando huellas en El Cairo (Egipto), Berlín y Wiesbaden (Alemania); Kramsach, Laxenburg, Graz y Viena (Austria), Picardie y Sebourg (Francia), Milán y El Vaticano (Italia), Delémont (Suiza), Preddvor (Eslovenia), Budapest (Hungría), Málaga (España), EE. UU., entre otros.
dbattilana@bc.com.py
Imágenes Silvio Rojas, gentileza