El celular: ¿es un elemento más en la mesa?

Nomofobia: Miedo irracional, angustia, pánico o sufrimiento desmedido a no estar conectado al teléfono o a internet, elementos que conllevan a un aislamiento social, porque la relación con el exterior se hace a través del WhatsApp, redes sociales, juegos on line, etc.

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Mobilfilia: Excesiva afición o simpatía al teléfono convertida en una adicción obsesiva compulsiva de estar mirando continuamente al teléfono para ver si se tiene alguna llamada o mensaje.

Phubbing: Se podría interpretar como el desatender a las personas que nos hacen compañía priorizando el uso del teléfono celular.

Para algunas personas, la imposibilidad de separarse de su teléfono ha creado una dependencia tal, que los psicólogos contemplan ya como nuevos trastornos estos factores que acabamos de citar.

Lamentablemente, hasta ya nos hemos acostumbrado a ver escenas de mesas en las que todos están chateando desde sus teléfonos en vez de hablar entre ellos, olvidando que en la mesa hay que guardar una mínima educación y compostura.

En la mesa, definitivamente, el uso del teléfono celular debe estar condicionado, simplemente por el respeto que nos merecen los comensales con quienes compartimos.

Algunas pautas mínimas que deberías de tener muy en cuenta para no transmitir una mala imagen personal:

n Recuerda que cada vez son menos las oportunidades que tenemos de compartir las horas de la comida con nuestras familias, amigos y compañeros. Este tiempo es valioso y el teléfono celular, aunque es útil, no es indispensable.

n Cuando se está disfrutando de una cena o almuerzo, el sonido del teléfono distrae e irrita. Interrumpe la conversación e impide disfrutar de una comida.

n Comer fuera con los niños no es excusa para entretenerse con el teléfono, lo ideal debería ser compartir con ellos ese momento.

n La paranoia de mirar continuamente el teléfono, a veces de manera involuntaria, es como un tic nervioso que altera a todas las personas que se tiene alrededor.

n Si la llamada que recibes es urgente, retírate a un lugar donde no se escuche tu voz desde la mesa.

n Sé breve y conciso, no hagas esperar a los comensales, recuerda que gran parte de la comida se sirve caliente y puedes arruinarles la cena a los demás.

n Para hacer una llamada retírate del recinto y discúlpate, no marques más de una vez, salvo que sea de suma importancia.

Finalmente, ten siempre presente que el celular no es un cubierto más y por ningún motivo debe ir sobre la mesa. Debe permanecer en el bolsillo o el bolso a modo de silencio y como máximo con alarma de vibración.

Hasta la próxima entrega…

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