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Google señaló que se está asociando con varias compañías tecnológicas y de productos electrónicos –Samsung Electronics Co, LG Electronics e Intel Corp, entre otras– así como la firma de ropa Fossil Group para desarrollar la nueva línea de relojes.
La unión con un amplio espectro de socios para desarrollar los smartwatches implica que Google está tratando de repetir el éxito que lo ayudó a convertir a su software Android en el sistema operativo más popular entre los teléfonos inteligentes, dijeron analistas.
El sistema operativo Android de Google es utilizado a nivel mundial por más del 75 por ciento de los smartphones. La compañía líder en internet dijo que el esfuerzo de llevar a Android a los relojes ha sido bautizado Android Wear.
“Apenas hemos empezado a ver lo que es posible hacer con la tecnología móvil“, contó Google en una publicación en su blog oficial el martes.
“Por eso estamos tan entusiasmados con los dispositivos para vestir: entienden el contexto del mundo alrededor tuyo, y tú puedes interactuar con ellos de manera simple y eficiente, apenas con una mirada o una palabra”, agregó la compañía.
Un video publicado en el blog de Google muestra a personas hablando a sus relojes para conocer resultados deportivos, controlar música, contestar mensajes de texto e incluso abrir la puerta del garaje de sus casas.
El anuncio se produce mientras aumenta la especulación sobre los presuntos planes de Apple Inc para incursionar en el negocio de los dispositivos para vestir.
El presidente ejecutivo de Apple, Tim Cook, ha prometido nuevas “categorías de productos” este año, y se presume que la empresa creadora del iPhone estaría trabajando en su propio reloj inteligente. Muchos creen que los dispositivos informáticos de indumentaria representan el nuevo gran cambio en la industria tecnológica, así como los smartphones evolucionaron desde computadoras personales. Sin embargo, hasta el momento varias compañías han tenido resultados dispares en el rubro. Samsung fue uno de los primeros que vendió un smartwatch para consumidores, pero su pionero esfuerzo, el Galaxy Gear, recibió muchas críticas.