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ENCARNACIÓN (José Miguel González, de nuestra redacción regional). “A veces prefiero ir caminando de tanto esperar el colectivo, no se sabe a qué hora va a pasar”, comentó Juana Arrúa, del barrio Chaipé, a unos cuatro kilómetros del centro de Encarnación. Su frase resume el sufrimiento de muchos usuarios del transporte público de pasajeros.
Pasaron los años y los pasajeros siguen siendo víctimas de ruedas que se desprenden en plena marcha de los buses, luces que no se encienden, frenos que no funcionan, caños de escape que despiden tremenda humareda, carteles que no se ven, ventanas que se caen, horarios e itinerarios que incumplen, cita una de las jóvenes que a toda prisa recorre los barrios para juntar firmas. Ella es Lizandra Rolón, quien agregó que los fines de semana la ciudad se queda sin buses.
A la larga lista agregó que la mayoría de los buses tienen techos que chorrean, choferes que maltratan, rampas inexistentes, estriberas altas o destruidas, asientos rotos, entre otras dificultades que sufren los pasajeros.
Cansados del pésimo servicio, estudiantes de colegios y universitarios de los barrios periféricos de esta capital departamental y de distritos aledaños, así como comisiones vecinales, juntan firmas para exigir la realización de una licitación nacional e internacional para el servicio de transporte público de pasajeros.
Mientras los usuarios se quejan y los jóvenes se movilizan para exigir un servicio acorde a una ciudad moderna, como lo es Encarnación, en una acción inconsulta la Junta Municipal, con los votos de la mayoría colorada, a través de una ordenanza, decidió darles siete años más de vida a las chatarras que circulan por la ciudad.
La ordenanza fue aprobada con los votos de Sebastián Emilio Remezowski Squef, Jorge Hrisuk Klekoc, Andrés Morel Fretes, César Albini Rojas Núñez, Eduardo Víctor Florentín Bolf, Diego Rafael Aquino Mercado, Pablo David Novosad Paszniuk y Ana María Palacios de Guerreño, todos de la ANR.
El martes, a la vez de vetar la ordenanza, Yd entregó a la corporación legislativa el pliego de bases y condiciones de la licitación nacional para la prestación del servicio de transporte público de pasajeros en Encarnación, que por primera vez es impulsado en un intendente en esta ciudad.