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CARAPEGUÁ (Emilce Ramírez, de nuestra redacción regional). La productora carapegüeña María Auxiliadora, propiedad de Lilian Brítez de Rolón, está procesando caña dulce solo para elaborar miel negra, que mantendrán en stock.
La propietaria indicó que procesarán la materia prima –caña de azúcar– hasta tanto se llenen sus tanques, que tienen una capacidad de 2.500.000 kilos de miel.
Otra señal de la crisis en el sector es la preocupación de los cañicultores del área de influencia de la planta de Petropar, en Troche, porque la misma procesará este año solo hasta 3.000.000 de kilos de caña dulce y el resto quedará sin cosecharse.
Brítez de Rolón contó que en su fábrica hay un stock sin comercializar de 500.000 kilos de miel y 60.000 litros de caña blanca.
Este año Capasa recibió de la empresa un total de 230.000 litros de caña blanca y el cupo ya se completó, por lo que tampoco se puede pensar en vender a dicha empresa.
Ante esta situación, la fuente expresó que ahora está pensando en envasar la caña, hacer tipo etiqueta negra de un cuarto y medio litro y vender en los mercados local y regional. Para el efecto está aguardando el permiso correspondiente y la certificación del Instituto Agronómico Nacional (Inan) y el Instituto Nacional de Tecnología, Normalización y Metrología (INTN).
Por su parte, el productor Carmelo Peralta, de Isla Ybaté, manifestó que él, al igual que varios agricultores de la zona, se endeudó para producir y con la esperanza de vender, pero que ahora no puede honrar sus deudas. Dijo que el gobierno nacional, a través de Capasa, es el que debería conseguir mercado internacional para poder ayudar a los pequeños cañeros del país.
Relató que no se encuentra tampoco mercado con otras empresas cañeras porque en su mayoría tienen su propio cultivo.