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El mismo destacó que la exportación de la carne bovina registró un crecimientos inusitado del 34%, tanto en volumen como en valor, si se toman las cifras desde el 1 de enero de este año hasta el 30 de abril, en comparación con el mismo periodo del año pasado.
Detalló que el mayor ritmo de exportación de la carne causó un récord parcial, con unas 111.384 toneladas por US$ 495,7 millones, contra las 73.586 toneladas por US$ 324,2 millones exportadas durante el mismo lapso del año pasado.
En consecuencia, la industria frigorífica registró una aceleración en el ritmo de trabajo. Durante los primeros cuatro meses del año en curso ya fueron faenados unos 758.000 bovinos, que se traducen en un promedio mensual de 189.000 cabezas.
Añadió que, de manera similar, las exportaciones de todos los productos de la cadena de la carne presentaron un incremento del 34% en valor y 29% en volumen, sobre las del primer cuatrimestre de 2020.
Detalló que la suma de las cifras de exportaciones de los rubros carne y menudencias bovinas; carne porcina, sus menudencias y despojos; carne aviar, con sus menudencias y despojos; así como también, los subproductos comestibles y no comestibles de origen animal, desde enero hasta el cierre del mes de abril, totalizaron 205.321 toneladas, por US$ 622 millones. Las exportaciones totales en los mismos rubros, en el mismo periodo del año 2020 fueron de 145.122 toneladas por US$ 406,6 millones.
Martin explicó que el principal motor del repunte de nuestra exportación fue el gran crecimiento de las compras de Chile, tanto en cantidad como en participación de mercado.
El titular del Senacsa consideró que el aumento del consumo en el mercado trasandino se debería, entre otras cosas, a causas coyunturales como la entrega de subsidios por parte del Gobierno a sectores de la población, por lo que podría no ser sustentable en el tiempo.
Igualmente, también impulsó el crecimiento de las exportaciones el mayor volumen importado por Taiwán, que se posicionó como tercer mercado en el primer cuatrimestre, tal como cerró el año 2020. Sin embargo, nuestro entrevistado dijo que todavía se espera más del citado mercado, por ejemplo la compra de menudencias bovinas, que se materializaría en las próximas semanas.
Estimó que el año pasado, Taiwán compró unas 24.000 toneladas de carne de Paraguay y que él espera que se pueda cerrar este año en más de 30.000 toneladas.
Con relación a la situación creada por Argentina, que es el cuarto exportador mundial de carne, cuyo Gobierno anunció la suspensión por 30 días de sus exportaciones de la proteína roja, José Carlos Martin opinó que aunque algunos podrían creer que beneficiará al Paraguay, enfatizó que eso no es así. “El Mercosur es un todo, en conjunto provee el 54% de la carne que se exporta al mundo, y si Argentina, Brasil o Uruguay tienen algún problema en el rubro, de alguna manera nosotros también sufrimos las consecuencias negativas”, indicó.
La Argentina, que es cuarto exportador mundial de carne bovina con 819.000 toneladas enviadas en 2020, exporta un 74,4% a China, 7,6% a Israel, 5,6% a Chile y 3,5% a Alemania, según reportes de agencias de noticias internacionales.
En ese sentido, se puede inferir que los mayores beneficiados con el espacio temporal de mercado que dejará la Argentina podrán ser Brasil y Uruguay, ya que nuestro país no tiene habilitado China, según indicó.
Expectativa ante posible apertura de EE.UU.
Por otra parte, el gerente de la Cámara Paraguaya de Carnes, Daniel Burt, comentó que ciertamente las exportaciones de carne han tenido un buen desempeño debido a la buena demanda de los diferentes mercados de nuestro país, pero que la incertidumbre persistente hace temer posibles retracciones. Estas se podrían dar como consecuencia de las medidas que nuevamente se están estableciendo en los diferentes países del mundo, en la lucha contra la pandemia del covid-19.
“La gran noticia que esperamos para este año es la apertura del mercado de los Estados Unidos a nuestra carne. Se aguarda la visita de los inspectores y luego la habilitación, aunque en una primera etapa solo se enviará carne industrial, para la elaboración de hamburguesas”, indicó.
Sin embargo, tras las certificación del mercado de EE.UU. a nuestra producción de carne, que será una validación que permitirá la apertura de otros mercados en los que no tenemos presencia, como Corea del Sur, Japón, México, Canadá, entre otros, que son muy exigentes. Paralelamente siguen las gestiones para exportar a países del Sudeste Asiático.
Carnes sostenible, orgánica, a pasto u otras
Burt mencionó que en el país existen diferentes proyectos ganaderos de certificación de la carne, como la sostenible, orgánica, a pasto, natural, etc., pero que todavía no se logró capitalizar la conveniencia comercial, de tal modo que puedan orientarse los sistemas productivos en ese sentido. Argumentó que por el momento es China la que al fungir de una gran aspiradora, está marcando las pautas en el mercado mundial de la carne.
Uno de los ejemplos es el que impulsa la Asociación Agropecuaria de Agua Dulce, cuyos productores asociados están ubicados en la zona del Alto Chaco, donde buscan generar valor agregado a su producción de carne implementando un sistema de producción regional con impactos positivos para la sociedad, la biodiversidad y la economía local y del país. Las características de la certificación son alta calidad, sanidad, bienestar animal, cuidado del ambiente y trazabilidad. El proyecto es financiado por la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID/Paraguay).
El 34%
La exportación de carne creció 34% en el primer cuatrimestre respecto al mismo parcial del año pasado, por lo que la ganadería sería el gran impulsor del 2021.
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