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El 25 de diciembre de 1990, Charles Bukowski recibió una computadora personal como regalo de Navidad de su esposa, Linda Lee.
(Como curiosidad, la PC era una Macintosh, aunque los versos iniciales de su poema «16-bit Intel 8088 chip» –with an Apple Macintosh / you can’t run Radio Shack programs / in its disc drive… (1)–, escrito unos años antes de recibir aquel obsequio navideño, dan la impresión de que Bukowski no era precisamente fan de Apple.)
No es descabellada la hipótesis de que esa Navidad del 90 cambió la literatura. De que el regalo navideño de Linda tuvo mil repercusiones invisibles, sutiles, mínimas que a la larga supusieron cambios relevantes en la obra de Bukowski, a través de la cual influyeron en otros escritores y así transformaron indirectamente toda la literatura posterior, hasta hoy.
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Desde aquella Navidad hasta su muerte, en 1994, Bukowski escribió en esa PC. Exactamente, desde mediados de enero de 1991, pasadas las fiestas de fin de año. También desde 1991 la producción poética de Bukowski, en términos cuantitativos, se disparó. Y también desde 1991 la imagen de las computadora se volvió recurrente en sus escritos, ya como elemento del entorno en algunas descripciones, ya como metáfora o figura cargada de (ambiguo) simbolismo, ya como materia de reflexión.
Bukowski toma la computadora como materia de reflexión, por ejemplo, en una carta del jueves 20 de febrero de 1992 a Ivan Suvanjieff, donde comenta sus observaciones sobre los efectos del uso de la PC en sus hábitos de escritura y revela que ese regalo de Navidad cambió lo que sentía frente a la hoja (o la pantalla) en blanco –lo que quieres escribir está ahí, le explica a Suvanjieff, pero «no salta de las entrañas tan rápido» (it doesn’t leap from the gut as quickly)–. La lectura de esa carta deja en claro que Bukowski estaba consciente de que «ver tus palabras en una pantalla frente a ti» (seeing your words on a screen before you) tenía que suponer algún tipo de cambio significativo en la mente de cualquier escritor e influir, por ende, en el contenido y la forma de su obra.
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Cuando Bukowski toca el tema de la computadora como parte de las preocupaciones de la vida cotidiana, el conocido catálogo de los atrasos que conllevó este adelanto –los nefastos efectos de los cortes de luz, el tiempo consumido en mantenimientos y reparaciones, los archivos perdidos, etcétera– sugiere a veces melancólicos parangones con la propia imperfección y caducidad. Y si saltamos de aquí a la computadora como figura poética, dentro de esta «veta informática» de la obra bukowskiana los siguientes versos, en los que la computadora convive todavía con la máquina de escribir, son particularmente famosos:
…if you have to sit for hours
staring at your computer screen
or hunched over your
typewriter
searching for words,
don’t do it (2)–.
«Con los ojos clavados en la pantalla de tu computadora» (staring at your computer screen), dice el verso de Bukowski, y así lo vemos a él en algunas conocidas fotos, pero en ninguna imagen el regalo navideño de Bukowski tiene una presencia tan poderosa como en el retrato del «dirty old man» hipnotizado por su monitor que reproducimos hoy en esta página. En la parte superior, a la derecha, hay una breve descripción:
«El viejo escritor se pone su suéter, se sienta, mira lascivamente la pantalla de la computadora y escribe sobre la vida. ¿Qué puede ser más sagrado?»
(Old writer puts on sweater, sits downs, leers into computer screen and writes about life. How holy can we get?).
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Es una de las ilustraciones de The Captain Is Out to Lunch and the Sailors Have Taken Over the Ship, libro de 1997 (3) que reúne a dos viejos campeones, uno del «malditismo» poético y el otro del cómic underground. Allí, el segundo –Robert Crumb– dibujó al primero –Charles Bukowski– sentado en su escritorio, las manos suspendidas sobre las teclas, los ojos fijos en aquel regalo de Navidad que nunca podremos saber con precisión de qué maneras y en qué medida transformó la mutante historia de la literatura desde fines del siglo XX.
Notas
(1) Charles Bukowski, «16-bit Intel 8088 chip», en You Get So Alone at Times That It Just Makes Sense, Santa Rosa, Black Sparrow Press, 1986.
(2) «…si tienes que sentarte durante horas / mirando la pantalla de tu computadora / o encorvado sobre tu máquina de escribir / buscando las palabras, / no lo hagas». Charles Bukowski, «So you want to be a writer?», 1994.
(3) Charles Bukowski: The Captain is Out to Lunch and the Sailors Have taken Over the Ship, Santa Rosa, Black Sparrow, 1997. Ilustraciones de Robert Crumb.