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Resaltó que, en el peor año de crecimiento de la economía a nivel país, la construcción fue el sector de mayor crecimiento y mejor desempeño y que actualmente emplea de manera directa e indirecta a cerca de 300.000 personas. “De esta forma, el año pasado este sector se expandió como nunca antes lo había hecho. Con un crecimiento de 12,6%, superó todas las barreras de la última década, lo cual contribuyó a que Paraguay haya sido uno de los países con menor impacto negativo en su economía a nivel regional en época de pandemia”, expresó y agregó que “esa barrera será nuevamente superada en este 2021″.
Al mismo tiempo, señaló que la decisión del gobierno de no parar con la ejecución de obras públicas es y seguirá siendo una buena estrategia para reactivar los demás sectores que forman parte de la economía del país, y el hecho de las restricciones sanitarias sean más flexibles este año también deja abierta mayores posibilidades de trabajo en conjunto que puedan impulsar aún más el crecimiento para lo que queda de este año.
La construcción está altamente correlacionada con la generación de ingresos en la economía, la cual crece cuando la construcción crece. “La contribución al crecimiento económico paraguayo por parte de la construcción ha sido una de las más estables y la única en no sufrir caídas en los últimos 13 años, frente a la de la agricultura, ganadería y manufactura”, expresó.
Agregó que, bajo esa línea, el sector ha crecido 34,8% entre mayo y junio del 2021 en relación con el mismo periodo del 2020. Este nivel de evolución no se había visto desde el último trimestre del 2003. En ese sentido, se puede decir que la construcción sigue con una dinámica importante y se proyecta un crecimiento en torno al 14% para el cierre de este año, alcanzando una participación del 7,7% en la generación del Producto Interno Bruto (PIB).
Sarubbi también señaló que Paraguay tiene brechas de infraestructura cercanas a unos US$ 20.000 millones y esta es una gran oportunidad para el sector de seguir desarrollándose a través de la inversión pública principalmente, pero para eso también es necesaria la buena y plena ejecución presupuestaria del MOPC.
Al mismo tiempo, enfatizó que también hay que fomentar la utilización de herramientas y leyes como la APP, concesiones, Ley 5074, entre otros. “Esto hará que pueda aumentar la inversión en infraestructura a través de un cambio de deuda del sector público al privado”, indicó.
“Paraguay debe seguir invirtiendo por encima del 5% del PIB en infraestructura si quiere mejorar su competitividad. La necesidad de realizar cambios profundos en la calidad del gasto público es también de suma importancia”, indicó.