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“Los caminos de las burreritas” se denonimó el proyecto impulsado este año por la Escuela Municipal de Danzas de la Municipalidad de Lambaré, con el objetivo de fortalecer la identidad cultural de la ciudad. Además, de proteger la identidad autóctona de la comunidad valorando el rol de la mujer, como portadoras de cultura.
Las burreritas fueron símbolo de autogestión económica de la ciudad y del país. Las mujeres fueron protagonistas y el auge se dio entre los años 1930 a 1970, de acuerdo a la iniciativa.
En la actualidad siguen con vida varias burreritas e hijos en la comunidad. Ellas fueron mujeres laboriosas que montadas en sus burros recorrían la ciudad dedicándose a la venta de mercancías (verduras, frutas, carne, entre otras cosas) para ganarse el sustento diario.
Esta actividad realizada de manera exclusiva por las mujeres dejó de practicarse por varios aspectos como los avances económicos, tecnológicos y sociales, pero aún se sigue teniendo el respeto y admiración al trabajo de las mujeres que llevaban adelante a sus familias.
Es por ello que Lambaré es conocida como la cuna del cacique Ava mbare y de las burreritas, especifica el proyecto.
A través de la iniciativa impulsada por la directora de la escuela, licenciada Nínive Orrego, se rescató las historias de la ciudad antes que se pierdan en el tiempo, ya que los relatos solo pasaban de boca en boca, pero no se tenían registros ni investigaciones metodológicas.
Se aprovechó que aún se podía obtener información de primera mano, con las mujeres de esa época.
Orrego comentó que el proyecto nació con la intención de rescatar la historia y una obligación moral de resguardar y cuidar celosamente la historia de nuestra ciudad para las futuras generaciones.
Las burreritas aún con vida son: Emeteria Aldana Vda. de Mendieta, María Dalmacia Vda. de García, Andresa Torres de López, De Jesús Delvalle Meza; Amelia Alcaraz Vda. de Paredes y Sofía Alonso. Además, Epifanía Meza, María Cerrada Almeida de Fernández, Salvadora Mendieta de Mutti; Daniela de Jesús González, María Bárbara Vielma de Alonso y Dominga León Vda. de Mendieta, según los datos de la comuna.
No suspendían ni por lluvia
María Dominga León viuda de Mendieta, una de las últimas burreritas de Lambaré con vida, relató años atrás a ABC sus vivencias en ese trabajo. La mujer recordó que comenzó a acarrear desde muy joven las mercaderías al Mercado Municipal Nº 1 de Asunción con su madre, Marcelina León. Comentó que llevaba tres burros cargados con batata, mandioca, poroto, coco, leche y todo tipo de frutas.
Expresó que el viaje no se suspendía ni por lluvia ni por el frío. “La pobreza de aquella época era tremenda y teníamos que trabajar duro. Todos los días me levantaba a las tres de la madrugada y preparaba los tres burros”, rememoró.
Comentó que por el camino se juntaban varias mujeres para ir en caravana hasta la capital del país a fin de ofrecer sus productos. Recordó que los asnos cuando se encontraban rebuznaban y eso significaba un saludo. Para muchos servía de sirena para despertar, señaló.
La mujer indicó que después de casarse con su difunto esposo, Marcos Mendieta, siguió con la tarea de llevar mercaderías al mercado. “Él (su marido) se encargaba de producir en la chacra, pues teníamos una propiedad muy grande para cultivar”, expresó.
Dijo que las mujeres de antes y en especial las burreritas trabajaban duro y sin descanso.
Esta ciudad cuenta con un monumento dedicado a las burreritas y se encuentra frente a la Municipalidad.