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SANTA ELENA (Desiré Cabrera, de nuestra redacción regional). Las actividades en honor de Santa Elena se realizaron respetando el protocolo sanitario, principalmente el distanciamiento social y el uso de tapabocas, para evitar el contagio del covid-19.
La misa central, presidida por el obispo de la diócesis de Caacupé, monseñor Ricardo Valenzuela, y concelebrada por el presbítero Celedonio Cantero, se llevó a cabo en el templo parroquial. Solo unas 50 personas participaron debido a las restricciones sanitarias. La mayoría de los devotos siguió la misa a través de radios comunitarias y redes sociales.
El obispo instó a la comunidad a seguir cumpliendo el protocolo sanitario del Ministerio de Salud Pública, a cuidar unos de otros con responsabilidad. Pidió mantener la esperanza y seguir trabajando con optimismo, a pesar de las dificultades.
También felicitó al intendente Miguel Olmedo (ANR) por la imagen que proyecta la ciudad, que además de tener una gran belleza natural está cuidada y limpia, con las principales calles con señalizaciones turísticas y “coquetas”.
El prelado alentó a la comunidad a apoyar el trabajo de la municipalidad y a colaborar todos para que Santa Elena siga siendo reconocida como un bello lugar para visitar. Exhortó a los jóvenes a ayudar en la limpieza de los lugares públicos para acostumbrarse a vivir en un ambiente saludable.
Luego de la misa central se realizó la procesión de la sagrada imagen por las arterias principales de la ciudad, con el acompañamiento de cientos de vehículos.
Numerosos devotos salieron frente a sus casas para orar al paso de la imagen sagrada de Santa Elena.
Santa Elena
El 18 de agosto se celebra el día de Santa Elena. Era madre del emperador Constantino y, según su historia, halló la que sería la cruz en la que murió Jesucristo. La emperatriz encontró otras reliquias de Jesús: los clavos que perforaron sus manos y pies, el “Titulus Crucis”, una parte de la túnica que utilizó antes de ser crucificado, un fragmento de la cuna donde Él reposó y la Escalera Santa. También recuperó las reliquias de los Reyes Magos y descubrió el sitio donde fue enterrado Jesucristo.
En Tierra Santa mandó construir tres templos: uno en el Calvario, otro en el Huerto de los Olivos y el tercero en Belén. Para proteger a su hijo Constantino en las batallas, Santa Elena colocó uno de los clavos de Jesús en su casco y otro en su caballo, de acuerdo al relato sobre su vida.
La santa falleció entre los años 330 y 335. Fue enterrada a las afueras de Roma y su sarcófago fue restaurado y trasladado en el año 1777 al Vaticano.
Fue la primera emperatriz romana que abrazó el cristianismo. Por su dedicación a la construcción, en algunos lugares se le considera a Santa Elena patrona de los trabajadores de construcción, también de los arqueólogos, de las personas convertidas al cristianismo, de los matrimonios difíciles, las personas divorciadas, las emperatrices, de los fabricantes de agujas y los de clavos. Cuando se pierde un objeto se recurre a Santa Elena y el mismo aparece sin buscarlo, cuenta la tradición.