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“Destaco el trabajo de la UIP, que se encuentra haciendo la tarea. Sin embargo, (la industria nacional) requiere de mucha más atención y acompañamiento por parte del Ministerio de industria y Comercio (MIC), principalmente en el fenómeno Mercosur”, apunta Pedro Osvaldo Céspedes, presidente de Zona Franca del Paraguay.
Considera que hay mucho por corregir y que se debería de partir desde el cuidado de la designación (o elección) de los negociadores técnicos paraguayos, ya que ellos muchas veces desconocen totalmente el esfuerzo de los empresarios industriales y sus necesidades. “Esto puede resultar muy perjudicial con la propuesta de convenios para la industria”, dice.
En ese contexto, señala que la UIP tiene mucho por hacer ante la actual política de promoción industrial en nuestro país, que carece de la voluntad necesaria para corregir las dificultades existentes.
Complejo industrial
Zona Franca Global del Paraguay S.A. (ZFG), que forma parte de la UIP desde hace tres años, es un complejo empresarial que cuenta con toda la infraestructura para la producción, logística, servicios y negocios. En Paraguay, las zonas francas se rigen por la ley 523/95 y diversas regulaciones y regulaciones.
Esta empresa privada ganó una licitación pública en 2002 y firmó el contrato de concesión y sus aditivos con el Gobierno paraguayo para promover, desarrollar y explorar una zona libre en Ciudad del Este hasta el año 2032, renovable hasta el año 2062.
Desde entonces, la Zona Franca Global se ha esforzado por ofrecer espacios físicos adecuados para la actividad y las personas, con un buen ambiente para negocios comerciales, industriales y de servicios, con la ventaja de estar muy cerca de los principales centros de consumo.