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Según el intendente Gerardo Rojas (ANR), esta situación se viene arrastrando desde hace varios meses y ya se han realizado innumerables reclamos, pero la aguatera estatal no realiza los trabajos de reparación.
Agregó que uno de los focos más graves se tienen sobre la calle principal que conecta la ciudad con las localidades de Isla Pucú y Caraguatay, en las cercanías de la sede de la Municipalidad.
Explicó que para la reparación de la cañería que tiene la pérdida se debe realizar una perforación en el asfaltado, trabajo que no se hace pese a los reiterados pedidos de reparación.
“Desconozco el motivo porque la Essap no está cumpliendo con las reparaciones, solicitamos pero hasta ahora no se ejecutan”, se quejó el jefe comunal.
En ese sentido el intendente señaló que lo único que les queda es construir canales en las vías para que el agua corra y deje de destruirlas.
En algunos sectores las grandes filtraciones de agua generan profundos baches. Esta situación se torna peligrosa para los automovilistas y motociclistas que transitan por la zona.
Muchos pobladores manifestaron que debido a los baches se registraron varios accidentes, incluso algunos llegaron a ser fatales.
“Muchos choferes para esquivar los pozos se meten en el otro carril y ocasionan accidentes porque colisionan de manera frontal. Los motociclistas son las principales víctimas de estos baches”, dijo uno de los pobladores.
Pese a los insistentes intentos por comunicarnos con la jefa regional de la Essap, Cristina Sosa, para conocer su versión de los hechos, en la oficina no nos atendieron.