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En sus filiales de Natalicio Talavera, Choré y Carlos Pfannl, el IPTA realiza investigaciones relacionadas con especies vegetales útiles para la producción y que durante el año llegan a las mesas paraguayas. Uno de estos trabajos apunta a definir la época recomendada según variedad; es decir, determinar qué material se adapta mejor a una zona en particular durante determinado periodo en el año, buscando obtener los mejores rendimientos. En cada caso, la institución se encarga de proveer las semillas o plantines a los responsables de cada localidad o a los cooperantes para trabajar en conjunto con los profesionales técnicos. Los cooperantes son productores de cada región.
PROGRAMA DE INVESTIGACIÓN DE CULTIVOS OLERÍCOLAS
Desde el IPTA, en lo que se refiere a cebolla de bulbo, los trabajos se realizan desde hace siete años, de manera de reconocer las variedades con mejores resultados en la primera, segunda y tercera época de producción. O, por ejemplo, si una variedad tardía permite obtener buenos rendimientos en la primera época. Aquí, la prioridad es observar los rindes. Por otra parte, una segunda investigación enfatiza en el uso de herbicidas, probando diferentes tipos para el control de malezas, que es uno de los mayores problemas en el campo. Y, finalmente, el tercer trabajo consiste en la ejecución de investigaciones por parte de estudiantes dela Universidad Nacionalde Asunción (UNA). Uno de los trabajos busca probar la productividad de cultivo de las variedades Caete, Dorada y Valencianita, considerando diferentes tipos de densidad y fertilización.
INSTALACIÓN DEL CULTIVO DE CEBOLLA
En la cebolla de bulbo es prioritaria la preparación de suelos para el semillero. Posteriormente, se tendrá en cuenta que la hortaliza posee tres épocas de siembra y trasplante. La primera es en febrero; la segunda, en marzo y la tercera, en abril. De ahí debe esperarse, aproximadamente, entre35 a40 días para llevarlo al lugar definitivo. Luego del primer periodo de siembra, el trasplante tendrá lugar de mediados de marzo y en cuatro a cinco meses será la cosecha. En la segunda (marzo), el trasplante será a mitad de abril para cosecharse entre los cinco y seis meses y, finalmente, la última cosecha será entre noviembre y diciembre, que es la más tardía.
RESULTADOS OBTENIDOS
El año pasado, la variedad tempranera Catarina y la tardía Dorada presentaron los mejores resultados, mientras que enla Valencianitael rinde fue muy bajo, principalmente por las condiciones del suelo. No obstante, este año se espera mejorar el rendimiento. Generalmente, el promedio productivo es de15 a18 ton./ha, aunque existen zonas del país que llegan a un mayor volumen.
APLICACIÓN DE HERBICIDAS
De acuerdo a la experiencia con este cultivo, a partir de las tres o cuatro hojas de cebolla es el momento oportuno para el control de malezas. En estos casos, se recomienda la aplicación de un herbicida preemergente tres días antes del trasplante. Luego, a los 20 días, se procede a la primera aplicación posemergente, y a otros 20 y 25 días, la segunda aplicación. Es fundamental hacer dos aplicaciones para un tratamiento más efectivo.
DENSIDAD RECOMENDADA
Los productores tienen en cuenta densidades de plantas que varían entre 20 cm x12 cmy30 cmx8 cm, aunque es recomendable utilizar una densidad de30 cmx12 cm, a fin de conseguir bulbos más grandes. El distanciamiento deberá ser mayor porque normalmente las cebollas compiten entre sí y, de estar muy cerca unas de otras, no tendrán un tamaño uniforme al momento de la cosecha.
PLAGAS Y ENFERMEDADES
Al año de investigación se notó una leve aparición de alternaria, aunque la antracnosis tuvo una mayor incidencia. Es así que mediante el apoyo de fitopatólogos y entomólogos del IPTA se desarrolló un plan de control con aplicación de productos determinados para combatir el ataque de hongos. En el caso de los insectos raspadores, se notó la presencia de ysau y akekê, cuando las hojas de la cebolla aún eran tiernas. Para cada caso se procedió al control pertinente.
USO DE TECNOLOGÍA
Hay que considerar que la carencia de variedades adaptadas al trópico ocasiona la falta de cebolla en verano. Sin embargo, podrían establecerse métodos de conservación del bulbo una vez cosechado. Por otra parte, a fin de lograr mejores rendimientos, el sistema de riego juega un papel fundamental, de modo de superar las 15 y 18 ton./ha. Aunque el riego debe ser preciso, no debe superar los niveles hídricos para evitar el ambiente propicio que favorece la aparición de enfermedades en las plantas.
(*) Técnico investigador del IPTA