Robótica para todos

Hacer de la robótica algo inclusivo y adaptativo, disminuyendo la brecha de acceso a las herramientas para su desarrollo, es lo que se propone Steam Educativo. Este emprendimiento lleva las clases a las aulas y barrios populares, demostrando que la educación del futuro no precisamente es la más costosa de todas.

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La robótica es la “técnica que se utiliza en el diseño y construcción de robots y aparatos que realizan operaciones o trabajos, generalmente, en instalaciones industriales y en sustitución de la mano de obra humana”. Desde hace varios años se habla de que enseñar esta disciplina en la primaria es la educación del futuro.

En el Paraguay, varias iniciativas se desarrollan para fomentar la enseñanza de robótica. Una de ellas es Steam Educativo, que, según sus creadores, es un método de aprendizaje que busca potenciar las capacidades de los estudiantes en etapa escolar de una manera diferente, divertida y entretenida. Con esto los prepararía para que sean capaces de identificar y desarrollar habilidades en áreas estratégicas necesarias, fortaleciendo a futuro sus destrezas, a través del empoderamiento de nuevos conocimientos.

Según los expertos, construir robots hace que los pequeños aprendan no solo los conceptos técnicos para desarrollar su idea, sino también a detectar los problemas, buscarles una solución, reflexionar y trabajar en equipo.

Steam es un proyecto del Instituto de Diseño y Tecnología (IDT) que lleva dos décadas de labor educativa en nuestro país. “Estos años de experiencia demostraron a sus directivos la necesidad de implementar la robótica en nuestro país y buscar la manera de hacer que sea algo adaptativo e inclusivo, que el factor económico no sea un punto limitante a la hora de su aplicación”, según explica Christian Alvarenga, director general de la institución.

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Democratizar la enseñanza

De manera a democratizar esta enseñanza, Steam realizó alianzas con proveedores asequibles, y utiliza programas, en su mayoría, de descarga libre, gratuita y segura. “Buscamos herramientas que sean fáciles para que, una vez terminado el curso, los alumnos puedan continuar explorando y construyendo”, dice.

Las clases se pueden dar en las salas de la institución, ubicadas en el centro de Asunción, pero el objetivo es que salgan de ahí y lleguen a toda la población, por lo cual realizan capacitaciones a docentes de distintas áreas para que puedan aplicar la robótica a sus clases y en todas las aulas del país. Alvarenga explica que esto no es solo para quienes quieran dedicarse a la ingeniería, ya que “también se puede hacer música con robótica”, dice.

Los alumnos aprenden a armar sus propios robots, pero antes de ello deben proyectarlo. Nivaldo Escurra, uno de los docentes de Steam, explica que el punto es buscarle una productividad a los robots. Así, algunos se hacen para medir la temperatura ambiental, el sonido; otros tienen sensores de movimiento. “La variedad y posibilidad de automatización son infinitas”, dice mientras pasa de una mesa a otra en las que los alumnos, concentrados, trabajan en sus pequeños robots.

Los más populares

Las edades de los estudiantes van de siete a 23 años. Al ser los intereses tan diferentes, también varían las funciones de los robots, y los más grandes se concentran en la impresión en 3D, con la que tienen la posibilidad de armar sus prototipos con hilos de plástico reciclado. En el aula también hay un dron que, según explican, es de bajo costo y peso, ideal para aprender a usar estos artefactos que suelen ser muy costosos en la oferta del mercado comercial. Los más populares son los robots en formas de cochecitos de juguete, que a través de sus sensores captan distancias y movimientos.

Aunque la etapa de programación de los prototipos parezca muy complicada, Escurra explica que se trata de patrones que, simplemente, hay que seguir y los programas utilizados, como Make Block, son de fácil uso.

Alvarenga comenta que varias veces hicieron talleres en barrios vulnerables de la capital, con resultados muy auspiciosos. El estímulo que reciben los pequeños y la capacidad de aprender que tienen son impresionantes, y en comparación con el proceso de aprendizaje de los mayores, la diferencia es abismal.

“Podemos hacer esto porque las líneas de materiales que utilizamos son muy económicas en comparación a otras que se utilizan en el mercado. Elegimos hacer esto fundamentalmente porque creemos que si los chicos no continúan con su formación, no se cumple con el objetivo”.

En un par de meses, Steam habilitará clases de forma gratuita para niños y niñas en sus instalaciones. Los datos aún no están confirmados, pero Alvarenga recomienda enviar las solicitudes por correo electrónico a info@steameducativo.com.

Sepa más 

Email: 

info@steameducativo.com

Teléfono: (021) 492-360/1

Dirección: Manduvirá c/Colón

Agradecimientos: Santino y Valentina Román Alvarenga.

mbareiro@abc.com.py 

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