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En 1774 se fundó, al sur de la Villa del Pilar, una población llamada a tener un preponderante papel cerca de un siglo después: Humaitá.
En ese lugar, años más tarde, funcionó una escuela de sanidad y se construyó una formidable fortificación artillada, destinada a servir de llave para el acceso al Paraguay por el río epónimo y estaba estratégicamente ubicada, presidiendo un recodo del curso de agua. Tanta fue la importancia que el presidente López Ynsfrán le dio al sitio que mandó construir una monumental iglesia dedicada a su santo patrono: san Carlos de Borromeo, fastuosamente inaugurada el 1 de enero de 1861.
Un paseo militar
En setiembre de 1930, conducidos por el director mayor Arturo Bray, se realizó un paseo de los cadetes de la Escuela Militar, para visitar los campos de batallas del Ñeembucú. Para su traslado, el Gobierno dispuso que dos buques de la Armada condujeran a los excursionistas hasta Pilar, donde las autoridades ofrecieron un banquete.
Aquellas jornadas castrenses constituyeron toda una fiesta cívica, con desfiles militares en Pilar; una gran concentración cívico-militar en Humaitá, donde se colocó una placa de bronce en el muro de la ruina del templo y, posteriormente, un recorrido por las trincheras de Curupayty.
En 1966, en conmemoración de la batalla de Curupayty, también se realizó una excursión militar a esos sitios.
Ochenta y ocho años después
El martes 24 de julio –coincidentemente con el onomástico del mariscal Francisco Solano López Carrillo y el Día del Ejército– se realizará en Humaitá una solemne conmemoración por los 150 años de uno de los más sentidos episodios de la Guerra contra la Triple Alianza.
En esta ocasión, en la noche del 23 de julio, se inaugurará la iluminación de los restos del templo, seguida de la llegada a Humaitá del cenotafio del general José Eduvigis Díaz, una velada y campamento de excursionistas.
Al día siguiente se realizarán los actos centrales, con un desfile cívico-militar y retretas, además de otros actos que contarán con la presencia de la vicepresidenta de la República, Alicia Pucheta.
De esa manera, se conmemorará el sesquicentenario de la caída de Humaitá en poder aliado, que selló determinadamente los acontecimientos que después se sucedieron en perjuicio del Paraguay.