Marcali al cuadrado

Con una exposición conjunta, Doble Aniversario de padre e hija, la artista plástica Melitta Marcali Kiss quiere celebrar dos acontecimientos: sus 50 años y los 80 de su padre, a partir del 7 de junio en el Centro Cultural de la Embajada de Brasil.

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Este año, la familia Marcali Kiss celebra un doble aniversario: 80 y 50 años, respectivamente, de los artistas Jòzsef y Melitta. Ella realizará una exposición conjunta que lleva por título Doble Aniversario de padre e hija. La muestra incluirá las creaciones de ambos pintores, en las que se transmiten la belleza de la naturaleza desde su fauna y flora, el agua y sus seres, figuras humanas, pinturas abstractas y simbólicas; en óleo, acrílico y acuarela.

“Mi padre, József Marcali Kiss, nació en 1936, y yo, en 1966. Lo celebraremos con la apertura de una exposición conjunta a partir del 7 de junio en la sala Livio Abramo, del Centro Cultural de la Embajada de Brasil”, comenta Melitta.

La artista visual húngara vino junto con Zoltán Szira, su marido, hace unos ocho años y se enamoraron de nuestro país. Tanto que, viendo que en Europa es cada día más difícil vivir, decidieron instalarse en Areguá a finales de noviembre de 2012. “Ahora comprobamos que es así. Hay muchos problemas allá. Y el Paraguay nos había gustado mucho; entonces, en el 2012 nos mudamos acá”.

Buscaron una casa por internet, la encontraron y compraron inmediatamente. “Areguá me encanta, es maravillosa y está cerca de Asunción. Si hay inauguraciones, exposiciones y trabajos, podemos salir. Es el paraíso”. La artista, quien está casada con Zoltán desde hace 23 años, comenzó a pintar en Budapest, capital de su Hungría natal, desde muy niña. “Yo nací dentro del arte”, cuenta. Su padre, Jòzsef Marcali Kiss, era artista y desde muy temprano les enseñó a ella y su hermana a dibujar, pintar y el linograbado. “Muchas técnicas. Estudié Arte en la universidad, pero mi verdadero maestro fue mi papá”, subraya.

Melitta es, además, profesora de Arte. Enseñó en las escuelas durante unos años, pero como no le gustaba lo estructurado, decidió abrir su propio taller. “Eso sí me encanta. Se puede mostrar la técnica, pero no se puede enseñar a todos de la misma forma. Cada persona es única”, afirma. De hecho, los sábados se dedica a la docencia en Asunción. “Acuarela, acrílico y óleo son algunas de las técnicas que enseño”.

La artista comenta que, hasta ahora, su pintura ha pasado por tres etapas. Durante unos 15 años solo se dedicó a la acuarela. “Hasta entonces era mi favorita. Es mágica y no puedes copiar. Me encanta porque puedes jugar con los colores, a pesar de ser una técnica difícil”. Cuando su padre enfermó, ya no podía pintar todo el tiempo; entonces, Melitta comenzó a ayudarlo. “Así me inicié en el óleo. Antes no quería. Mi padre pintaba con pincel. Su técnica es hermosa y única. Nunca la vi en otra persona. Tenemos una serie de trabajos conjuntos en los que firmábamos juntos”, recuerda.

Como ella no quería copiar, Jòzsef le mostró la técnica del espatulado al óleo. “Eso me encantó. Y hasta ahora utilizo la espátula, aunque a veces también el pincel”. Después vino el acrílico, de la mano de otros pintores. En verano se realizan simposios de arte en varias ciudades de Hungría, donde los artistas viven por una o dos semanas. Estos se reúnen, conversan, intercambian ideas y hasta pintan juntos. Uno de ellos le enseñó la técnica del acrílico.

“Entonces, comencé a pensar cómo plasmar mis ideas. De acuerdo a ellas, busco cuál es la mejor para pintar”.

La artista afirma que no está arrepentida de haber venido al Paraguay. Asegura que si bien en Hungría ya pintaba y era profesora de Arte, aquí cambió su mentalidad. “Encontré mi ruta total. Acá encontré más fuerza, intensidad. Estoy inspirada todo el tiempo. Los colores son increíbles siempre: rojos, naranjas, verdes, azules... ¡Hermosos! Y eso se puede apreciar en mis obras, también. ¡Mis cuadros nuevos están llenos de colores!”. Agrega que también le gusta mucho la calidez y alegría de la gente. “¡Acá festejan todo!”.

Respecto a su próxima exposición, recuerda que la primera vez que vio la galería de la Embajada del Brasil, decidió que allí celebraría con una muestra su 50.° cumpleaños y los 80 de su padre.

La apertura contará con la presentación del crítico de arte Osvaldo González Real. La muestra permanecerá abierta hasta el 22 de junio, de lunes a jueves, de 8:00 a 17:00, y los viernes, de 8:00 a 14:00.

mpalacios@abc.com.py

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