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"¡Qué lindo todo!", fue lo primero que dijo el diseñador Ricky Sarkany ni bien llegó al cóctel (directo desde el aeropuerto) donde presentaban su nueva colección. Saludó, estrechó manos, intercambió risas y besos, para luego recibir a ABC Revista en la oficina de Susana Coscia y Caro López Moreira, representantes de la marca en Paraguay, el primer mercado extranjero de la firma. “Ellas confiaron en mí, me propusieron abrir una tienda con mi nombre y acepté encantado, para mí es muy especial porque fue el primer local fuera de la Argentina y ya he venido a Paraguay un montón de veces”, expresa el diseñador que “enloquece” a las mujeres con sus diseños ultravanguardistas. Pero, por qué las mujeres compran tantos zapatos. “Mirá”, dice Sarkany y dispara: “Las mujeres compran zapatos cuando están alegres, cuando están tristes, enojadas, deprimidas, cuando tienen una reunión, cuando no la tienen o por si la tengan, cualquier excusa es buena porque en realidad lo que ellas compran es gratificación. Se sienten distintas cuando usan o cuando piensan que lo van a lucir, cuando entran a la vidriera, cuando se lo prueban, cuando compran, todos son momentos muy especiales. La relación de la mujer con los zapatos, no la tienen con los suéter, en algunos casos sucede con las carteras”.
Para el diseñador esta actitud se relaciona con el cuento infantil: La cenicienta. Todo gira alrededor de un zapato de cristal que termina siendo ni más ni menos que el símbolo del amor y la felicidad. “Tal vez una mujer cuando compre un zapato esté comprando esos sentimientos. Siempre cuento que Confucio, en el año 400 a.C., decía: Me preguntás por qué compro arroz y flores. Compro arroz para vivir y flores para tener algo porque vivir. De alguna manera esto es la flor, la gratificación, la mujer expresa mucho de su personalidad a través de los zapatos.”
Hay libros que hablan de la personalidad femenina a través de este accesorio. Dentro de este esquema, el trabajo de Sarkany -dicho por él mismo- es ser observador de cómo se maneja la mujer en su sociedad, en su cultura, para luego promover distintas propuestas y estas tienen que ver con lo emocional, con lo emotivo.
Sarkany aprendió a diseñar “por transfusión sanguínea”. Su bisabuelo era zapatero, su abuelo y padre también y él va por la cuarta generación. “Mi padre llegó a la Argentina en 1950, desde Hungría y, de alguna manera, estaba ligado a las celebridades. Le hacía los calzados a Zsa Zsa
Gabor, una Marilyn Monroe europea. Él diseñaba en el living y cortaba los moldes en cartulina, y con los pedacitos que caían al suelo yo hacía zapatos en miniatura, tenía tres años más o menos, y cuando tenía un ratito libre iba al taller donde los artesanos armaban las piezas, así que uno lo lleva en la sangre, pero el cambio fundamental comienza cuando termino el colegio, cuando tenía que decidir una carrera porque mis padres no querían que fuera artesano, querían una carrera universitaria para mí. Entonces, me anoté en ingeniería, ciencias económicas, marketing y tuve otra visión, pero el músculo creativo de la familia pudo más y volví a los diseños. Te comento que mi padre fue el primero que hizo una bota y una sandalia en la Argentina”.
Sarkany, para posicionar la marca y diferenciarla de las demás, dejó de vender los diseños a las zapaterías y le dio un horizonte más amplio, ¿cómo?, llegando al usuario, sabiendo sus gustos, a qué se dedica y otros detalles. “Fue una decisión estratégica muy importante. Tuvimos un crecimiento brutal. Nuestro desafío de cada mañana es superarnos, sorprender, crear lo fantástico y esa actitud se refleja en los resultados”, admite.
Cuenta con un equipo de diseñadores que se capacitó en Berlín y Milán, otros que no estudiaron diseño pero tienen magia. “El trabajo lo hacemos en equipo, en el cual se les permite, a todos, aportar y opinar. Pero contratar una modelo, Roxana Zarecki en el año 1997, para promocionar la marca fue acertado”, cuenta. “Fuimos a Japón y luego publicamos en varias revistas; fue un suceso. Hoy las redes sociales permiten llegar a todas partes y con la revolución de la tecnología, la comunicación es distinta y rápida, de ahí que también tenemos que ser rápidos para acompañar y satisfacer”, agrega haciendo un paralelismo.
Revela que es el empresario latinoamericano con más seguidores en Twitter, secundado por un mexicano. “La tecnología hace maravillas, es lindo saludar por las mañanas y tener un retorno fabuloso al instante. Hay una interacción fantástica, porque cuando publicás un modelo, enseguida la gente opina y eso ayuda también a mejorar, a crecer”.
En otro momento de la charla con ABC Revista, expresa que para lucir e impactar tiene mucho que ver la actitud femenina. “Caminar con soltura, con seguridad, hará brillar a una mujer, sin duda alguna, pero hacerlo tímidamente, con pasos cortos, es estar destinada a pasar desapercibida. Uno puede elegir un calzado extravagante con un tono llamativo, pero es la actitud la que va a determinar el brillo y ser el centro de atención a la hora indicada”.
Vienen a su mente las frases de un escritor compatriota suyo. “Muy mayor, pero andaba siempre muy pituco y cuando resaltaban este hecho, él respondía: Es mi manera de decorar el mundo. Bueno, hay que tratar de estar siempre bien puesto, justamente de eso se trata de divertirse y de decorar el mundo”, expresa con una amplia sonrisa.
No hay famoso que no haya atraviado el mundo con una de sus creaciones. “Casi todas usaron unos Sarkany en algún momento. Sabemos que hay gente muy pero muy famosa y poderosa que ha elegido uno de nuestros diseños para la alfombra roja y la verdad que es importante porque bien podía haber llamado a Gucci, a Ferragamo, sin embargo optó por nuestros zapatos. Puede ser esnobismo o no querer usar lo mismo que los demás, pero se identifica con nosotros y entre esos también tenemos desde Ricky Martin, Chayanne, Gina Lollobrigida, Raísa Maksímovna Titarenko, esposa de Mijaíl Gorbachov, Sonia Braga, Adal Ramones, un montón de personalidades número uno y eso nos gratifica”, destaca.
La moda, para el empresario, fue evolucionando y adoptando matices transgresores, innovadores, muy contrario a lo que era antes. "Anteriormente, el tenis se jugaba con un atuendo muy tapado, hoy los atletas lo hacen mostrando la mayor parte del cuerpo y es porque los tiempos cambiaron. Los últimos diez años la tendencia cambió, los cinco, los tres, los últimos meses; cambia todos los días. El extraordinario desarrollo de la moda se debe a la importancia que para el hombre moderno tuvo, progresivamente, la apariencia”.
Dentro de esta constante evolución, ¿qué prefiere Sarkany? Bajos o plataforma. “La plataforma no me seducía mucho, pero le encontré el gusto. Las plataformas ayudan a las de baja estatura. No nos olvidemos de las altas que, a veces, se reprimen de usar tacones y ¡no tienen por qué hacerlo! No tienen que limitarse en autoagradarse... Esa misma libertad que exigimos como país, es la misma libertad a la hora de vestirse”, asegura.
También recuerda el primer diseño. Fue para su hermana, el calzado “tenía la punta separada del talón y estaba todo arrugado, poseía plataforma y taco alto”. De aquel tiempo a esta parte, claro que hubo evolución y para bien. Mercados como Chile, Perú, Colombia reciben sus diseños y hay convenio con otra fábrica extranjera para poder abastecer a todos los rincones del mundo. Es que sus propuestas son sexis, lujosas, modernas, transgresoras, con estilo particular, único e irrepetible. Tiene en cuenta comodidad, diseño, le pone pasión y dedicación a los detalles. “Todos deben calificar 10”, revela.
El clan Sarkany va por más, su hija Sofía también está incursionando en este mundo, “con diseños más locos todavía”, expresa orgulloso. Y la sangre no es agua.
ndure@abc.com.py