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Lo hizo por mera curiosidad. Apenas se enteró que el Tribunal Superior de Justicia Electoral (TSJE) habilitó el buscador para verificar las firmas pro reelección que había presentado el oficialismo, ingresó a la web de la institución. Casi con sorna, cargó su número de cédula y le dio enter. Grande fue su sorpresa cuando instantes después en la pantalla de su computadora estaban su nombre completo y su número de documento como uno de los 293.000 firmantes que pedían el rekutu (lista depurada).
Pero había un problema: él nunca había firmado; es más, nunca siquiera se lo propusieron.
Comentó la situación en un grupo de WhatsApp que comparte con excompañeros de colegios, los mismos con los que días atrás se habían anotado para participar de un torneo de exalumnos. Uno a uno comenzaron a revisar y el resultado era el mismo: todos aparecían como firmantes sin haber visto siquiera una de las planillas de recolección de firmas.
Ante esta situación, buscaron la página en la que supuestamente habían firmado y la indignación fue aún mayor. Sus nombres aparecían en el mismo orden en el que habían completado la lista de buena fe del torneo en el que querían participar. Los números de cédula, mayoritariamente estaban bien completados, pero las direcciones no correspondían y mucho menos las firmas.
ABC Color accedió a una copia de la lista de buena fe del equipo y también de la planilla que supuestamente firmaron sus componentes. Efectivamente, el orden era el mismo. Los denunciantes solicitaron el resguardo de sus identidades por temor a posibles represalias.
Más y más denuncias
Como esta, numerosas han sido las denuncias que han surgido desde que el viernes de la semana pasada, referentes del cartismo entregaron al TJSE las 366.000 firmas que supuestamente recolectaron para solicitar la instalación de la figura de la reelección presidencial por el camino inconstitucional de la enmienda.
A través de redes sociales, Juan Carlos Giménez, un ciudadano de San Lorenzo y afiliado al PLRA, denunció que había sido incluido entre los signatarios de las planillas sin haber firmado nunca. Su nombre y su número de cédula aparecían acompañados por un garabato que no era su firma (ver fotografía).
Similar postura tuvo Leonardo Fernández, oriundo de San Antonio, quien si bien es afiliado a la ANR, nunca rubricó su firma en la planilla, pero también aparece como firmante. El hombre indicó que acudió a la Fiscalía de su ciudad, pero que lo dejaron esperando por más de dos horas y no le tomaron la denuncia.
Otro caso muy llamativo es el de Pedro Ayala Bracho, quien aparece como firmante en el TSJE. Sus datos aparecen en el orden 9 de la planilla con folio 17059.
Sin embargo, en la planilla siguiente (folio 17060), vuelve a aparecer en el orden número 2, pero con una firma totalmente distinta.
ENTRE MUERTOS Y MÁS
Un verdadero papelón es el que está pasando la ANR como consecuencia de las ansias reeleccionistas del cartismo. El propio TSJE confirmó que más de 73.000 firmas fueron descartadas de las 366.000 de las que se jactaba inicialmente el oficialismo colorado por una serie de irregularidades.
Por ejemplo, entre los firmantes aparecían 1.142 muertos. También se detectaron 27.174 personas que firmaron más de una vez. Además hubo 19.498 firmantes que no estaban inscriptos en el padrón, por lo cual no estaban habilitados para avalar la presentación. Más de 12.000 aparecían con datos que no coincidían con sus cédulas. Y la lista sigue.