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El departamento de Cordillera fue el único donde el Partido Colorado perdió en las elecciones generales del 2013, hecho que el presidente de la República Horacio Cartes no olvida y repite en cuanto mitin político se realiza en la zona.
La Gobernación es administrada por liberales hace más de diez años y de los 20 distritos cordilleranos, 13 cuentan con intendentes liberales y siete colorados.
Hegemonía en riesgo
La hegemonía liberal atraviesa una grave crisis actualmente en el tercer departamento. Las relaciones entre llanistas y efrainistas se encuentran completamente rotas, pese a que concluyeron las internas el 17 de diciembre.
A pesar de que el efrainismo, a través de Hugo Fleitas, tuvo una contundente victoria en las internas, no es suficiente para conservar la Gobernación. A esto se añade la poca trayectoria que tiene Fleitas, un oftalmólogo, cuyo primer cargo fue el de intendente de Isla Pucú, donde estuvo apenas dos años, sin haber realizado una destacada labor al frente del pequeño municipio.
Este panorama favorece al colorado Hugo Meza, candidato a gobernador. Pero como aspecto negativo para el electorado su candidatura fue impuesta prácticamente por Cartes, quien apostó a su relativamente buena gestión como intendente de Itacurubí de la Cordillera, durante un periodo y medio.
Meza se promociona como candidato honesto. Sin embargo, esta imagen se vio opacada por la divulgación de una valiosa propiedad, donde tiene su granja, que no se justifica con sus ingresos. El candidato cartista niega cualquier irregularidad y alega que es un bien de la familia.
Sin unidad granítica
A pesar de darse el abrazo republicano, los líderes del Partido Colorado piden la unidad granítica, la cual está muy lejos de ser real. Los disidentes aún no asimilan la derrota de Denis Lichi en las internas de diciembre y se resisten a trabajar con los considerados “dinosaurios” de la ANR como el senador Julio “Pichín” Quiñónez, quien quiere hacer el rekutu pero aparece en el lugar 26 de la lista. Otros cuestionados por los disidentes son el parlasuriano José Torres y el diputado Nazario Rojas, de Tobatí.
El sector disidente también tiene en sus filas al clan González de Piribebuy, integrado por los hermanos Víctor, actual diputado; Roberto, candidato a diputado, y Cayo, exintendente y actual concejal, conocidos por haber ubicado a sus parientes en el sector público.