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CIUDAD DEL ESTE (Mariana Ladaga, de nuestra redacción regional). El ministro Jungmann visitó ayer Foz de Yguazú para verificar los trabajos que las Fuerzas Armadas de su país desarrollan en el marco del operativo “Ágata 11”. En conferencia de prensa, afirmó que el ataque entre narcos, en el que murió Jorge Rafaat, “nos preocupa muchísimo, atendiendo el nivel de organización y el poder de fuego, con ametralladoras que demostraron las facciones criminales”.
“Creo que Brasil tiene que intentar, en cooperación con los vecinos y por medio de una actitud diplomática, inhibir este comercio de armas que es un atentado a nuestras poblaciones. Creo que una actuación conjunta de los países fortalecería, ayudaría mucho”, dijo. Agregó que debido a la crítica situación que se vive en la frontera entre Pedro Juan Caballero y Ponta Porã (Brasil), ya se amplió la presencia de militares en esa región.
El funcionario contó que para reforzar la seguridad en la frontera, el martes, Brasil recibirá un satélite israelí, de baja altitud, con capacidad de resolución de hasta medio metro, que puede identificar matrículas y personas. El aparato estará de prueba seis meses y será utilizado con miras a los Juegos Olímpicos, pero que se pretende la utilización de este y más satélites posteriormente.
Consideró que la solución definitiva pasa el relacionamiento diplomático, la cooperación con los gobiernos estaduales y municipales y el proyecto Sisfron (Sistema Integrado de Monitoramiento de Fronteras).