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Estos dirigentes invocan al propio presidente de la República, Horacio Cartes, para cometer los atropellos. En ese sentido, es necesario destacar que después de que se reunieran con el Mandatario, días previos a la huelga general del 26 de marzo pasado, empezaron las ocupaciones.
En Guarambaré invadieron más de 60 hectáreas y una gran parte está siendo reclamada por la empresa Telsec SA, de la familia Dávalos, que tenía proyectada la construcción de un parque industrial en el lugar.
Esta firma asegura ser la propietaria de unas 23 hectáreas, pero los ocupantes dicen que los títulos son ilegales. La justicia, que debe determinar cuál de las partes tiene la razón, no ha avanzado mucho en la investigación y los ocupantes se afianzan en el sitio.
En Ypané, un condominio de más de dos hectáreas y media fue ocupada, por seguidores del seudodirigente, Simón Limeño, que según las denuncias vende las “parcelas” como si fuesen de su propiedad.
Además este supuesto dirigente se apoderó de dos lotes en el asentamiento 29 de agosto de la zona de Potrerito, al costado del Acceso Sur.
La denuncia fue presentado en el Juzgado de J. Augusto Saldívar, a cargo del juez Leonardo Ledezma, quien pese a los documentos arrimados, no emitió resolución.
La dilación en los procesos permite que los falsos dirigentes se sigan burlando de las leyes de la nación, con la excusa de reivindicar causas sociales.
Muchos de estos invasores ocupan una parcela para luego venderla al mejor postor. Si la justicia no actúa y no se castiga a los dirigentes y a los ocupantes ilegales, los atropellos irán en aumento.
hruizdiaz@abc.com.py