Los partidos y la partida de Belgrano

Algún historiador debe corregir esto, pero el 10 de julio del año 1887 fue realizada una reunión de ciudadanos paraguayos para darle vida al Partido Liberal. El acto se verificó en el edificio que hoy conforman las calles “Nuestra Señora de la Asunción esquina Oliva, sede por bastante tiempo del Banco del Brasil. Era una Asamblea fundacional y llevó la denominación del “Centro Democrático”. En Villarrica, sobre la calle Helio Vera casi Gral. Díaz hay una placa en un edificio, pintado de rojo, que certifica que en ese edificio se fundó el Partido Liberal. Era el domicilio del señor Antonio Taboada.

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La Asociación Nacional Republicana (ANR), hoy llamada popularmente “Partido Colorado”, fue fundada el 11 de setiembre del año 1887 con el nombre de Partido Nacional Republicano por el General Bernardino Caballero, quien, durante su estadía en Villarrica, vivió en una casa que fue pintada con vivos azules. Solamente en el Guairá pueden ocurrir estas cosas, la casa del fundador del Partido Liberal pintada de rojo y la de Bernardino, fundador del Partido Colorado, con tonos azules. El revés guaireño queda como una insignificancia ante tanta extravagancia. 

La ANR estuvo en el poder desde su fundación hasta el 2008, salvo el periodo comprendido entre 1904 y 1946, unos 42 años de espacio liberal y gran parte dedicada a revoluciones, peleas y una bien en serio contra el pueblo boliviano que, además de dejar pérdidas humanas, dejó pérdida de tiempo y de territorio. 

Hace poco restablecieron relaciones las dos Koreas luego de años de no hablarse, no corresponderse ni de poder verse y mucho menos hablarse. El deporte tuvo mucho que ver en la buena mixtura coreana del aceite con el vinagre. Unos juegos olímpicos les acercó y también un exbasquebolista americano, amigo del extravagante presidente de Korea del Norte, Kim Jong-un, le ablandó la mente, el corazón y su inaudita pasión de amenazar al resto del mundo. 

Así como la política partidaria paraguaya se reduce a dos partidos, los partidos de fútbol se reducen a dos políticas deportivas: El Olimpia y el Cerro Porteño. El primero fue fundado el 25 de julio de 1902 por el holandés afincado acá, William Paats y es el decano del fútbol paraguayo. 

El popular Cerro Porteño arranca su historia en la casa de la señora Susana de Núñez, mamá de 4 hijos que practicaban el fútbol. Las revoluciones de la época sirvieron de sustento para que la entidad llevara los colores rojo y azul y, más tarde, se completó la bandera patria con el pantaloncito blanco. Doña Susana era fanática del Partido Liberal y el esposo un acalorado republicano, situación que también incidió para que la mezcla del rojo y el azul flameara desde el 1 de octubre del año 1912. 

La historia también es rica y hasta política ya que un ejército argentino al mando del Gral. Manuel Belgrano atravesó el Paraná por la hoy Itapúa para que el país pasase a depender de la Argentina. Belgrano se instaló muy cerca de Paraguarí, el cerro Mba’e y la batalla comenzó al amanecer del 19 de enero de 1811. El entonces gobernador Velazco y las fuerzas paraguayas retrocedieron y fueron desbandadas. Pero Fulgencio Yegros y dos oficiales más rearmaron el ejército y esa misma tardecita remangaron a Belgrano hasta el Paraná. El pequeño cerro Mba’e pasó a llamarse Cerro Porteño y es el recuerdo de la primera victoria paraguaya que sirvió de antesala a lo que pasaría un poco más tarde, el 14 de mayo de 1811. 

¿Será que en este 2018 al 2023 podremos juntarnos todos y así como le dimos a Belgrano, ir al grano en pos de un entero y verdadero desarrollo?

caio.scavone@abc.com.py

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