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En tres semanas de pesquisas en el hospital Nanawa del Instituto de Previsión Social (IPS), el equipo de investigación de nuestro diario constató cómo algunos médicos rabonean o directamente no acuden al hospital los días que deberían hacer guardia.
Pero esto no logró detectar en tres meses al frente del nosocomio el doctor Mirrael Álvarez, quien asumió en julio último, luego de ser intervenida a raíz de la detección de la venta ilegal de medicamentos del ente. Es más. Cuando los periodistas le pidieron los registros de entrada y salida de algunos médicos, redactó un documento en el que hizo constar los datos de los integrantes del equipo de investigación de ABC, que supuestamente denunciaron las anomalías. Este documento se publicó el martes en otro medio.
Antes, Álvarez pidió a los periodistas que no publiquen nada, porque se encargaría de abrir el sumario para investigar las irregularidades que estaban ocurriendo bajo sus narices. Ante la negativa de cumplir su petición, registró el pedido de datos como una denuncia.
Uno de los casos que ABC Color denunció el martes último guarda relación con Perla Paredes Acosta, hija de la diputada colorada Perla Acosta, que registraba su entrada a las 06:57, pero recién comenzaba a atender a los pacientes a las 07:45. Poco más de las 09:00 se retiraba. Regresaba casi dos horas después, luego de pegar un largo desayuno e ir a la peluquería.
El otro caso involucra a la Dra. Perla Canata, que en vez de hacer su guardia se pasaba en el estacionamiento, dentro de un auto, en compañía de su novio, José Rosas, un funcionario de la comuna capitalina.