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Una serie de versiones que llegaron al diario ABC Color indicaron que el terreno del RC4 fue robado al predio del Jardín Botánico y Zoológico de Asunción a través de un decreto firmado en su momento por el general Andrés Rodríguez, luego de asumir la jefatura de Gobierno.
La denuncia fue tomada por la redacción del diario y transmitida a la Dirección de Catastro de la Municipalidad de Asunción, donde obran los planos originales y la historia de todos los predios existentes en el ejido urbano de la capital.
El director de Catastro Municipal, Anatoli Pugín, exhibió los planos catastrados entre los cuales se halla una mensura judicial del Jardín Botánico, que data del 30 de setiembre del año 1965. En el documento se delimitaba el terreno del área verde y se diferenciaba el predio de la firma Liebig Extract of Meat Company, que en ese entonces ya era ocupado por los regimientos de Caballería 2 y 4 (RC2 y RC4).
De esta forma, quedó descartado el rumor que sindicaba a las tierras como una sustracción de predio del Jardín Botánico, uno de los “pulmones verdes” más importantes que tiene la ciudad.
El terreno fue oficialmente transferido al Ministerio de Defensa el 15 de noviembre de 1989 a través de un ofrecimiento realizado por la empresa Paraguay Agriculture Holding SA, representada por Juan D. Martin, a través de un documento que fue refrendado por un decreto firmado por el presidente Rodríguez. A partir de allí, las tierras de Liebig (individualizadas como las fincas número 2098 y 3685) corresponden al Ministerio de Defensa.
Una porción de terreno colindante con el RC4 también le fue otorgada al Ministerio de Defensa a través de una permuta. Los descendientes de Regis Cabrera, quien poseía una derechera en el terreno del lado opuesto al Jardín Botánico, nunca culminaron la sucesión, por lo que terminaron cediendo las tierras al Gobierno a finales de la década del 90, a cambio del predio donde estaba asentado el estadio Roberto Bettega y hoy en día es un depósito de contenedores.
Conflicto
El predio del RC4 será sede del barrio San Francisco, que será construido por la Secretaría Nacional de la Vivienda y el Hábitat (Senavitat) en el marco de un proyecto que estará coordinado por la Itaipú Binacional. Serán 1.000 viviendas las que alberguen a pobladores de la Chacarita Baja, según dijo la ministra de la entidad, Soledad Núñez.
El proyecto es rechazado por la Coordinadora de Defensa Zeballense ya que, según argumentan, la construcción de las viviendas terminará por destruir una de las áreas verdes que sostienen al Jardín Botánico.
Incluso, indican que aún está pendiente en el Congreso Nacional la declaración del predio como “área silvestre protegida”, por lo que se ratifican en que el proyecto es inviable en esa zona.
Según el jefe de Gabinete de la Senavitat, Amílcar Guillén, el proyecto no afectará a ninguna zona boscosa y la discusión debe girar en torno a evitar que miles de familias sean desplazadas a localidades lejanas a la capital, lo que generaría un sobrecosto en cuanto a transporte y servicios.
La ministra Núñez, durante una visita al diario ABC Color, exhibió los planos del proyecto e informó que la zona llana –contigua al sector arborizado que colinda con el predio del RC4– es la que albergará a las viviendas sociales.
Sobre esta explicación, los zeballenses argumentan que ese predio puede ser reforestado.