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Esta dependencia del Ministerio de Educación trabaja capacitando a personas jóvenes y adultas que, por diversas circunstancias, no han podido culminar el ciclo básico o la educación media a tiempo.
Una de las características de estos programas es que no presentan la misma rigurosidad que la escuela en cuanto a tiempo y lugar. Los cursos pueden comenzar en cualquier época del año y pueden desarrollarse en cualquier lugar.
María Inés Flecha, directora de Educación Permanente, explicó que en los últimos años han cambiado los parámetros de medición para determinar si una persona está o no alfabetizada. Se estima que hay 230.000 analfabetos totales en nuestro país.
“Anteriormente se podía decir que al poder leer y escribir un texto sencillo la persona ya estaba alfabetizada. En la actualidad, no. Es necesario manejar la lectura, la escritura, la comprensión de lo que se lee, hacer cálculos matemáticos básicos y también manejar las tecnologías de la información y comunicación (TIC) a fin de que la persona pueda ser útil a sí misma y a su país”, explicó. Estos nuevos indicadores de evaluación han sido establecidos por la UNESCO, según explicó.
Agregó que están trabajando en la elaboración de informes para precisar la cantidad de personas que han asistido en los últimos meses a los cursos de alfabetización, que se desarrollan en varias modalidades.
Aunque adelantó que lastimosamente no se ha podido cumplir con las metas establecidas con anterioridad.
El centro también ofrece cursos de formación profesional en peluquería, panadería y otros.