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“Quiero agradecerles por sus oraciones pero lastimosamente Víctor no aguantó. Acaba de fallecer. Es la Voluntad de Dios”, fueron las palabras de un familiar cercano al niño, quien confirmó su fallecimiento.
Víctor Manuel Ramírez Martínez (8) fue sometido en la madrugada de ayer a un trasplante del corazón en el Hospital Pediátrico Niños de Acosta Ñu, gracias a la aparición de un donante, puesto que solo tenía un corazón artificial provisorio. Sin embargo, no pudo superar la cirugía.
El doctor Marcos Melgarejo, jefe del Servicio de Cardiocirugía del Hospital Pediátrico “Niños de Acosta Ñu”, trató de dar a la familia un halo de esperanza a la familia a pesar del estado complicado del pequeño al finalizar la operación. Sin embargo, la historia cambió bruscamente de sentido en unas horas.
El reporte final del galeno explica que “después de pasar las primeras horas del pos operatorio estable, el paciente trasplantado se fue deteriorando rápidamente hasta que finalmente entró en un cuadro de shock refractario y termina falleciendo a pesar del enorme esfuerzo de todo el equipo médico”.
La donación del corazón fue gracias a la solidaridad del esposo de una mujer de 48 años con muerte cerebral, internada en el hospital privado, quien decidió donar los órganos. La ablación de órganos se efectuó en el sanatorio Británico de Asunción. Entretanto, la cirugía para trasplantar el corazón a Víctor comenzó poco después de las 03:00 de este sábado, hora en que el órgano llegó al hospital Acosta Ñu, ubicado en el barrio Reducto de San Lorenzo.