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Stephanie Narváez, estudiante del último año de Derecho y compañera de clases de la presidenta del centro de estudiantes, Alejandra Vera, denunció que el equipo ganador ahora cayó en el burdo juego de la “cacería de brujas” bajo la premisa: “Ale Vera de punta a punta”.
Nadie que no haya pertenecido a su equipo proselitista deberá ocupar un cargo, aunque sea mínimo, en la casa de altos estudios, parece ser la consigna.
Stephanie explicó que el pasado 22 de marzo, dos días antes de los comicios del centro de estudiantes, ya se realizaron las elecciones de delegados de curso. Resultó ganadora Nélida Cristaldo, más conocida como Nelly. A quien ahora Vera supuestamente quiere sacar del cargo porque cometió el “pecado” de colgar en sus redes sociales una fotografía con Manuel Maioli, quien fue también candidato a ocupar el centro y terminó siendo el más férreo contrincante de la hija del ministro.
“Alejandra cree que puede colocar a su gente en donde ella quiera. Su dinero sirve en la calle pero no acá en la facultad. Ella y su equipo convocaron para los próximos días a una asamblea estudiantil para solicitar el cambio, sin ningún motivo, de nuestra delegada del curso, quien fue electa legítimamente”, disparó muy enojada e indignada Stephanie.
Agregó que “a esta persecución hay que ponerle freno. Somos estudiantes de Derecho. Debemos saber defender nuestra postura o no servimos para esta profesión. La hijita de papá ahora gana las elecciones del centro de estudiantes y se cree que puede jugar con nosotros así”.
Ostentosa campaña
Esta elección del centro de estudiantes de la Facultad de Derecho de la UNA tomó estado público por el derroche y la ostentación de las campañas electorales de los candidatos al centro de estudiantes. Alejandra Vera –hija del ministro de la Secretaría Antidrogas Hugo Vera– ganó los comicios que se realizaron el pasado viernes 25 de marzo.
Alejandra Vera obtuvo 1.189 del total de 2.596 votos registrados ese día; mientras que su inmediato contrincante, Manuel Maioli obtuvo 1.063, según los datos oficiales del Colegio Electoral. La diferencia entre ambos fue solo de 126 votos.
El camino al poder de Vera fue marcado por una ostentosa fiesta de cierre de campaña con bebidas gratis para miles de personas, además de sorteos de viajes a Camboriú y un automóvil entre sus adherentes. En esa ocasión, los periodistas que realizaban la cobertura del evento fueron agredidos por los seguidores de Vera, quienes ya fueron imputados.
Maioli también organizó un gran cierre de campaña en un local con el concierto de los Kchiporros.