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El director del centro de salud de Lambaré, Silvio Alfredo Chirife, informó que prácticamente todas las salas del hospital están ocupadas con pacientes con dengue, que requieren observación. “Estamos en una guerra y no tenemos una sala para cada paciente. Priorizamos los casos de acuerdo a su gravedad; no abandonamos a ninguno”, resaltó.
Indicó que algunas personas no quieren esperar para realizar la consulta por presentar síntomas del dengue o para recibir el resultado de su análisis laboratorial. “Se atiende por orden de llegada, pero si aparece un paciente con síntomas de alarma, se prioriza”, explicó. Agregó que la consulta en ocasiones demora porque los médicos deben ser rigurosos.
“Hay tres médicos y la atención puede demorar hasta diez minutos para realizarse bien el diagnóstico. Un paciente puede necesitar terapia en solo dos horas, y eso es responsabilidad del médico”, señaló.
Por su parte, la jefa de Enfermería, Sandra Benítez, señaló que para agilizar los trámites, colocan carteles informativos. “El paciente debe realizarse su análisis de laboratorio y en dos horas puede retirar su resultado. Que venga en ese lapso y se mantenga ese ritmo, agilizan la circulación”, explicó.
Ambos profesionales resaltaron la importancia de acudir al hospital o al centro de salud más cercano ante la aparición de síntomas del dengue, para realizar un seguimiento de la enfermedad.
Redistribución
Chirife señaló que con su equipo médico debió realizar una reestructuración de las salas para ubicar a los pacientes con dengue. “Ha disminuido el número de consultas, pero la cifra de gravedad aumentó. Dos de cada diez que consultan requieren atención”, informó.
La salas de pediatría, alto riesgo y otras están abarrotadas de pacientes con mosquiteros. Aun así, no son suficientes. En sillones, los pacientes reciben suero para su hidratación. Permanecen allí un par de horas, hasta que se encuentran mejor.