Los locales supuestamente se sitúan en contra del Plan Regulador y han “invadido” el barrio en los últimos tres años.
Los afectados denunciaron que con la apertura de negocios, día a día, es una constante la falta de respeto de las personas que estacionan frente a sus cocheras y en las veredas. Hicieron hincapié en la polución sonora y la cantidad de basura que se genera, ya que muchos son pub’s y bares.
La vecina Liza Velázquez afirmó que “antes de que se ponga un ladrillo” ellos ya habían denunciado las irregularidades y que, sin embargo, la Comuna dejó que los locales sean habilitados. “El personal municipal es el que tranza con los dueños de estos negocios”, afirmó. Sus aseveraciones no fueron negadas o refutadas por ninguna autoridad presente.
Explicó que incluso varios locales ya fueron multados, pero siguen abiertos de noche.
Las autoridades confirmaron que son 120 los locales irregulares y prometieron acciones. Guillermo Valdez, jefe del Departamento de Licencias Provisorias, argumentó que las ordenanzas vigentes le exigen que otorgue las licencias provisorias a locales con solo una declaración jurada.
Al respecto, el concejal Federico Franco (Juntos Podemos) adelantó que se está trabajando para la modificación de las normas.