En medio de la desesperación que tienen los allegados al enfermero que trabajaba en el puesto de salud de la colonia Zanja Morotî, a unos 150 kilómetros de la ciudad de Concepción, piden una prueba de vida debido a que hace 28 días que no se tiene información sobre su paradero.
“No nos dirigimos a ningún grupo armado en especial, enviamos el mensaje a quien pudiera tener a mi hermano. Decimos esto porque no sabemos qué pasó de él”, expresó Rosa María Gómez Candado (34), una de las hermanas de Bernardo. Anadió que el enfermero tiene una hija de 7 años.
El pasado 10 de mayo Gómez Candado fue de cacería a un monte de la estancia “La Gringa”, acompañado de su tío Aurelio Gómez. Ambos se separaron, pero después de escuchar un disparo el testigo volvió al lugar donde debían encontrarse y ya no estaba.