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Se trata de Graciela Gavilán (41), quien era funcionaria civil de la Policía y que últimamente prestaba servicio en la Intendencia Policial. Falleció a las 5:45 del pasado lunes en el Hospital de Policía “Rigoberto Caballero”, donde ingresó el día anterior a las 16:00.
El hermano de Graciela, Juan Gavilán, dijo en conferencia de prensa ofrecida que ella padecía diabetes e hipertensión, pero que estaba medicada y controlada.
Luego relató que su hermana sufrió fuertes dolores abdominales y fiebre el sábado último, por lo que recurrieron al servicio médico SASA para asistirla, primeramente. Tuvo una leve mejoría, pero el domingo volvió a sentir molestias.
Por esta razón Graciela Alarcón de Gavilán, madre de la funcionaria, fue hasta el policlínico para cerciorase si su hija podía o no ser admitida. Tras tener una respuesta positiva, la trasladaron hasta el hospital donde “tropezamos con las trabas de la directora (comisario Nilda Villalba) que siempre nos crea problemas para la atención por ser civiles”, dijo Juan Gavilán.
En el nosocomio fueron recibidos por la doctora Alejandra Britos, quien les dijo que “no iba a poder admitirle hasta tanto se comunique con su superior”. Recién luego de una hora, la paciente fue admitida y ubicada en el área de urgencias.
Los familiares denunciaron falta de atención médica y que los profesionales no les mostraban los resultados laboratoriales ni informaban sobre el estado de la mujer.
Apoyados por el Sindicato de Funcionarios civiles de la Policía solicitarán ante la Comandancia de Policía la destitución de Villalba del cargo que ocupa.
Infección crónica
El vicedirector del hospital policial, doctor Édgar Ortega, explicó que la mujer ingresó al nosocomio con dolores abdominales intensos y fiebre, por lo que fue internada. Añadió que la mujer había dicho que estaba embarazada, pues tenía un retraso menstrual, lo que fue descartado a través de estudios y que el trastorno se debió a un cuadro de hiperglucemia, pues la misma fue diagnosticada con diabetes mellitus y una infección urinaria severa.
La causa de muerte fue “una infección urinaria que le causó una infección generalizada y el punto en contra fue la hiperglicemia. Tenía 7 veces más de azúcar en la sangre de lo normal”, señaló Ortega.
Por su parte, Nilda Villalba detalló que la paciente se realizó seis consultas previas: por hipertensión arterial, por diabetes no controlada e infecciones urinarias a repetición, lo que coincide plenamente con las causas de su fallecimiento.