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La fiscala Martínez informó que tres futbolistas contactaron con el Ministerio Público por ser posibles víctimas del dirigente de Rubio Ñu de Luque.
Mencionó sin embargo que tienen miedo de sanciones disciplinarias por parte de la Unión del Fútbol del Interior (UFI), que inhabilitó al jugador Bernardo Gabriel Caballero tras el escándalo de la viralización de videos y fotografías que sacaron al tapete los abusos que se cometerían en los clubes de fútbol, donde la promoción o no de jugadores está a expensas de acceder a favores sexuales.
“Estas personas deben ser entrevistadas para ver si deciden denunciar. Llaman a averiguar y dicen que pasaron por la misma situación, pero todavía no se deciden”, explicó Martínez.
También indicó que tuvieron que resguardar a la segunda víctima Fermín Morínigo (exjugador de 19 años) y brindarle protección policial luego de que González lo haya amenazado.
Medida de protección
Por su parte, la UFI, que decidió excluir al Rubio Ñu de Luque de participar en cualquier competición deportiva, trató de explicar ayer la sanción a Caballero, hecho que generó indignación en las redes sociales.
Su presidente, Enrique Benítez, dijo a “Cardinal Deportivo” que no se trataba de una sanción sino de una “medida de protección” y que solo sería por uno o dos días, hasta que el jugador comparezca en la UFI.
Esta “protección”, sin embargo, beneficia hasta ahora al imputado Antonio González porque ninguna víctima ya se anima a denunciarlo.