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“Te queremos” dice la entrada principal de “La Tablita”, un lúgubre local que funciona como casa de citas en la zona roja de Cuatro Mojones, en donde el pasado 4 de octubre, la fiscalía ingresó para buscar el supuesto cuerpo de una menor que estaría enterrado en el patio. La denuncia fue realizada en la Comisaría 15ª metropolitana por una niña de apenas 12 años, que escapó del sitio en donde, según los indicios, era sometida sexualmente.
La historia de “La Tablita” no es reciente en el submundo de la trata de personas y proxenetismo. En 1995, la Policía hizo un operativo para rescatar a mujeres que eran obligadas a brindar servicios sexuales en tres prostíbulos de Asunción, Lambaré y Fernando de la Mora. Entre los locales allanados estaba “La Tablita”. En aquella ocasión, la incursión policial finalizó con 20 mujeres rescatadas, 16 de ellas eran menores de edad. Este tipo de procedimientos se fueron repitiendo en varias ocasiones en el mismo lugar, con los mismos resultados; menores rescatadas y ningún responsable preso.
“Ningún ser humano merece estar en estas condiciones”, dijo Aurelia Melgarejo, vecina del lugar y que en más de una ocasión conversó con las mujeres que trabajan en estos lupanares.
Dijo que decenas de mujeres llegan y salen cada semana. Todas son del interior del país y vienen para tratar de trabajar en lo que sea.
La fiscala Teresa Martínez fue tajante y señaló que estos prostíbulos no solo deben ser clausurados, sino demolidos.
“Estos lugares, por sus condiciones, tienen que ser clausurados y si es posible, demolidos, independientemente de lo que se realiza en su lugar. Tienen unas habitaciones en el fondo, que hacen de vivienda, todo es asquerosamente sucio”, expresó Martínez.
abenitez@abc.com.py