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“Creo que vamos a mantener una vez más el tope de producción”, fijado en 30 millones de barriles diarios (mbd) desde finales de 2011, declaró Ramírez.
El ministro iraquí de Petróleo, Abdul Kareem al-Luaibi, también anticipó que la OPEP dejará su techo de producción sin cambios. “Hay indicaciones de que se mantendrá el tope de producción”, dijo el representante de Irak a reporteros que lo esperaban en Viena.
El “mercado está estable”, dijo el responsable ecuatoriano, cuyo país, que era el más pequeño productor de la OPEP, produce ahora 550.000 barriles de crudo diarios, más de lo que bombea Libia.
Venezuela -uno de los cinco países fundadores de la OPEP, en 1960, y que guarda una gran influencia en el cártel-, Irak y sobre todo Arabia Saudita, el primer productor mundial de crudo, han afirmado que buscarán mantener la oferta en su nivel actual, lo que garantiza que los precios se mantendrán en unos 100 dólares el barril.
Desde la última reunión de la OPEP, en diciembre del 2013, los precios del crudo evolucionan dentro de un margen muy estrecho, alrededor de los 100 dólares el barril para el WTI y de 110 dólares el barril para el Brent, cotizaciones juzgadas “adecuadas” por Arabia Saudita.