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Se trata de un trasplante pionero también en lo que al tratamiento se refiere, ya que es el primero que se realiza sin medicación a base de inmunosupresores gracias a la perfecta compatibilidad genética entre donante y receptora
El alumbramiento fue por cesárea y la madre y el niño están “en perfecto estado de salud”, según un comunicado de Eugin, un grupo de centros de reproducción asistida de referencia a escala española e internacional del que forma parte clínica Stockhol IVF, cuyo director es el ginecólogo sueco Mats Brännström.
La operación ha tenido como protagonistas a hermanas gemelas de origen serbio que viven en Italia y una de ellas, la receptora, nació sin útero debido a una malformación congénita. El trasplante se realizó en Belgrado; después la receptora se sometió a un tratamiento exitoso de fecundación in vitro y durante el embarazo fue asistida por un médico de Bolonia.
Brännström es autor del primer trasplante de útero realizado en el mundo, que se hizo en 2014. En todo el mundo, se hicieron por ahora 40 intentos de trasplante uterino, lo que ha llevado a once nacimientos vivos.