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Cuando la aeronave sobrevolaba la cordillera continental, los pilotos se desorientaron debido a una fuerte ventisca y el aparato acabó estrellándose en una de las montañas.
A bordo del avión viajaban 45 personas de las que al final sobrevivieron 16.
En el accidente y hasta la primera semana murieron 18 personas.
A los diez días escucharon en una radio portátil que tenían que se había suspendido el rescate, dándoseles por muertos.
Como si todo fuera poco, a 16 días de estar en la montaña, un avalancha se desató durante la noche arrastrando los restos del avión y matando a otras 8 personas.
En un par de semanas morirían tres personas más.
Los sobrevivientes, en un momento dado, tomaron la difícil decisión de alimentarse con la carne de los fallecidos para mantenerse con vida.
Tres papas en dos meses y atentado en San Pedro
En 1978, tres pontífices se sucedieron en poco más de un mes al frente de la Iglesia Católica, el último de ellos terminó siendo el Papa más carismático de los últimos tiempos, cuya vida fue atacada en la plaza del Vaticano, por un hombre mentalmente inestable.
La Iglesia vivió desde los 1950 hasta los 1970 una etapa de transformaciones claves en su interior. El mayor paso en ese andar fue el Concilio Vaticano II, convocado por Juan XXIII y continuado por Pablo VI.
Luego de esa etapa capital, se sucedieron en un año tres pontífices, en un llamativo hecho histórico.
A la muerte de Pablo VI, el 6 de agosto de 1978, fue elegido el 26 de ese mes un cardenal que tomó el nombre de los dos pontífices anteriores: Juan Pablo.
Inesperadamente, murió al cabo de un mes, el 28 de setiembre.
Entonces, el 16 de octubre de 1978 fue elegido un cardenal polaco, el primer papa no italiano en 456 años, Karol Wojtyla, que tomó el nombre de Juan Pablo II, como continuación de su antecesor, que solo había regido la Iglesia por 33 días.
Así, en dos meses y medio, la Iglesia Católica tuvo tres papas.
Juan Pablo II se convirtió en un dirigente carismático que conquistó a su feligresía y a no fieles en todo el mundo.
Al mismo tiempo, fue un baluarte firme contra el totalitarismo comunista, que conocía bien, al haberlo padecido en su Polonia natal.
Con esa firmeza y carisma recorrió todo el mundo, más de 120 países, uno de ellos el Paraguay, a mediados de mayo de 1988.
El primer “bebe probeta”
1978: Reino Unido anunciaba con gran alegría el nacimiento del primer bebé (probeta) que llegó al mundo concebido mediante técnicas de fecundación in vitro.
El 25 de julio de 1978 la pequeña Louise Brown nació en Londres. Pesó 2 kilos 31 gramos y tuvo un desarrollo normal.
Todo el tratamiento médico de la madre –Lesley Brown– estuvo a cargo del ginecólogo Dr. Patrick Steptoe y el fisiólogo Dr. Robert Edwards.
Louise Brown, en 2007, tuvo a su primer hijo, concebido de forma natural.
La familia Brown tuvo otra niña después gracias a la fecundación in vitro: Natalie, que se convirtió, en 1999, en la primera persona nacida gracias a los modernos procedimientos médicos que daba a luz a un hijo concebido de forma natural.
Terror en JJ.OO.
1972: Durante los Juegos Olímpicos desarrollados en Munich, en 1972, un grupo de 8 terroristas asaltó la Villa Olímpica matando a dos israelíes (un entrenador y un atleta) y secuestrando a 8 miembros del equipo.
Los secuestradores demandaron un avión para escapar.
Las autoridades alemanas planificaron una liberación en el aeropuerto.
En la fallida operación murieron todos los israelíes, 5 terroristas y un policía.
Gobiernos militares en América
Tras la Segunda Guerra Mundial el planeta se dividió en dos grandes bloques: el regido por el comunismo de la Unión Soviética, y países alineados con Estados Unidos.
Las democracias occidentales eran una clara opción moral ante el totalitarismo comunista.
Sin embargo, Washington terminó apoyando dictaduras en países de América, África y Asia mientras esas frenasen el comunismo en sus países.
Surgieron así gobiernos militares en casi todos los países, que evitaron el surgimiento de regímenes totalitarios comunistas, como el que se implantó en Cuba (aun vigente), pero a costa de aplicar también ellos la represión violenta.
La lucha contra la tiranía comunista con tiranías opuestas terminó debilitando la causa de la libertad en nuestra región, dando nacimiento, hasta el día de hoy, a filocomunistas que solo recuerdan las dictaduras opuestas.