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CARACAS (ANSA, AFP).La tarima iba a ser plantada en el acto final, en la Plaza Venezuela, lugar donde tenían previsto llegar tres manifestaciones ayer.
Uno de los detenidos es Winston Flores, hijo del diputado opositor Leomagno Flores.
“Yo lo considero que independientemente que sea hijo mío o no, si lo detienen por estar supervisando la instalación de una tarima para un evento de una protesta pacífica, se le está violando sus derechos porque eso lo permite la Constitución”, expresó el parlamentario a los periodistas.
Flores dijo que su hijo, junto a los otros jóvenes, fue trasladado a la Comandancia de la GNB.
A su vez, la opositora María Corina Machado confirmó a través de la red social Twitter que efectivos de la Guardia Nacional Bolivariana, “sin alegatos y de forma arbitraria”, se llevaron “detenidos” a un grupo de estudiantes y “desmontaron” el acto.
El movimiento estudiantil junto a la sociedad civil organizaron marchas desde tres puntos distintos del este de la capital venezolana, ayer, a poco más de dos meses del inicio de las protestas antigubernamentales.
Los manifestantes avanzaron desde tres distintos puntos de Caracas vistiendo ropas de color rojo, azul y amarillo, los colores de la bandera de Venezuela, y llevando pancartas que clamaban “Resistencia” tras más de dos meses de protestas opositoras con un saldo de 41 muertos y unos 600 lesionados.
Las manifestaciones en Venezuela se iniciaron en San Cristóbal el 4 de febrero con reclamos por la inseguridad y se extendieron a otras ciudades por la crisis económica, las violaciones de derechos humanos a manifestantes y la detención de líderes estudiantiles y opositores.
181 agresiones a la prensa
CARACAS (AFP). Durante los más de dos meses de protestas en Venezuela se han registrado 181 agresiones, robos y detenciones contra comunicadores, la mayoría cometidos por funcionarios gubernamentales, denunció ayer El Sindicato Nacional de Trabajadores de la Prensa (SNTP).
“El SNTP registra 181 agresiones contra 137 comunicadores”. “Funcionarios del Estado han sido responsables del 60% de los ataques” y un “25% por manifestantes identificados con la oposición y el oficialismo”. La organización contabiliza 82 casos de hostigamiento, 40 de agresiones físicas, 35 de robos o destrucción de equipo de trabajo, 23 detenciones y un herido de bala.